jueves, 31 de mayo de 2012


LA LOCURA




Sólo los locos tienen una visión correcta del mundo. Los demás padecemos un estrabismo deformante. Ana tiene una vivencia extraordinaria de la locura. Va de sí misma hacia sí misma, cada vez por un camino que siempre empieza y termina en la comprensión del caos como única vida con estilo. Pasan a su lado  señores con corbata y mocasín italianos, señoras-peluquería-pantén, banqueros con un porsche en la solapa,  parejas poniendo en orden la vida, casadas por el rito legal, absolutamente legal. Han dejado el amor en el armario porque escandaliza el beso, la caricia sin sujetador carcelario, la fusión de la sangre como un brindis a la primavera elegante de un jueves soleado. Nadie desde Erasmo amó tanto la locura como ella. Va por el mundo con un ramo de locura en la mochila, ama con locura y te acoge en su locura tibia de pan recién hecho. Cada anochecer cambia los muebles de su alma, llena de flores su cama para soñar un chanel de estrellas perfumadas. Cada mañana desordena la luz para no repetirse en la vivencia y estrenar el mar en los adentros de una caracola de mares exiliados.

Es el momento de una turbia economía envenenada. Somos simplemente dinero, déficit, rescate, prima de riesgo. Los políticos dicen estar empeñados en poner orden en el mundo, en refundar el capitalismo, en equilibrar ingresos y gastos. El mundo es un enorme banco sin fachada para que nadie reconozca el edificio donde se crea esclavitud, desprecio por lo humano, avaricia amontonada. El mercado es el pantocrator de un bizancio de barrio estéril y mugriento. Ya no existe París. Lo eliminaron por incompatibilidad de elegancia y estiércol, para que los amantes no se citen nunca allí porque el amor desprestigia, porque la cintura del Sena es un lujo sólo para prostitutas con flores bordadas en la entrepierna. Economía es el mundo. Línea rectilínea la existencia sin cabida para picasos y dalies. La recta es lo geométricamente correcto, símbolo del orden ordenado, de lo conseguido por unos gobernantes carentes de aventura creadora, rutinaria conversación sobre el tiempo en un ascensor herméticamente asustado.

El mundo se ha vuelto cuerdo. Los poetas están arrinconados. Archivadas las lunas. Clasificados los vientos en las estanterías de un museo arruinado. Nada vale la pena si está fuera del orden. Las rosas son recuerdos de cuando la primavera era aventura. Las estrellas, huellas de una madre enterrada que fue buena y hermosa. La muerte no es una decisión, sino una ley de vida que tiene que cumplirse, como un destino tatuado con fecha de matadero. Prohibido el suicidio porque la muerte está socializada, convertida en negocio de ataúdes repletos de langostas que alimentan al dueño de las pompas con un Volvo que transporta esqueletos vestidos de Verino.

Está en orden el orden. Satisfechos los presidentes del euro, los terratenientes de la gloria, los ministros del revólver, los guardianes de pistolas de azabache reluciente. El mundo está en su sitio, sin posibilidad de girar sobre su eje, olvidado del sol como destino anual. El dinero es el río encauzado que nunca será mar, porque el mar es rebelión, desmesura, sin orillas  tirantes sujetando una hechura. Hay que asesinar al mar por indomable, porque no cabe en las bolsas de dinero, ni en las manos ni en los ojos.

¿Qué habrá sido de Ana, tan divinamente loca ella, tan hacedora de mundos de colores, de caballitos pintados, de elefantes de juguete, de gatos que maúllan partituras de Bach, Schubert o jazz? ¿De dónde vendrá?  ¿A dónde irá? Era hermoso verla pasar, con su mochila cargada de locura,  contemplarla dormir en su cama con flores de retama, desordenando la luz para hacer de cada día la inauguración de una vida conquistada.

Hoy, desde mi jaula herrumbrada de residuo de siglo XXI, recuerdo sus ojos indagando el desorden, sus manos orfebres del caos más hermoso, sus brazos desnudos anudándose el mar a la cintura.

El mundo vale la pena porque hay locos que lo crean cada día.







viernes, 25 de mayo de 2012


LA IGLESIA AUSENTE




 Cuando la Iglesia pretende ser hoy lo que fue durante el franquismo, está persistiendo en su propia blasfemia y empeñándose en lo que debía ser su más reprochable vergüenza. Durante cuarenta años dominó las conciencias apoyando la autoridad de su báculo en la ciénaga pestilente de una dictadura cruel, asesina, destructora. Y lejos de un arrepentimiento redentor, pretende seguir ejerciendo un dominio moral sobre los ciudadanos libres en democracia.

La historia no es un retorno sobre sí misma. Tiene por el contrario un trazo lineal, y aupada en el ayer se encamina siempre hacia el mañana. De ahí que no debamos confundir historia y pasado en una identificación carente de profundidad. Y quienes se empeñan en no distinguirlos, se petrifican, se fosilizan y pierden la fuerza viva y apasionante de la existencia. Y esto le anda pasando a la Iglesia. Anclada en el pasado, no es capaz de crear un futuro caliente capaz de acoger al hombre de hoy, las necesidades de hoy, las aspiraciones de hoy.

Se empeña en la cerrada defensa de ciertos postulados que pretende fundamentar en el derecho natural y la palabra revelada. En el terreno filosófico nadie sostiene hoy la categoría de “orden natura”  puesto que el ser humano evoluciona y se define por coordenadas existenciales que nada tienen que ver con la filosofía de “las esencias” propia de otras épocas. Y en cuanto a lo revelado, la Iglesia debería tener en cuenta que  en su historia ha manejado como revelación posiciones que después han sido revertidas. Su postura frente a visiones científicas que han permanecido inexpugnables durante siglos y que por fin han tenido que ser reconocidas como simple intransigencia secular. Decir por tanto que esta es la doctrina que siempre ha defendido la Iglesia es, además de una miopía histórica, la apropiación indebida de un Dios que por definición es una infinitud inalcanzablemente misteriosa.  

Desde Constantino, la Iglesia inició una unión espuria con los imperios de turno y más tarde con los gobiernos. El Papa no sólo es jefe del estado Vaticano, sino que ha sido aclamado como rey hasta hace poco. Y sobre todo la Iglesia ha encontrado cobijo y protección en las dictaduras. Ha ido acumulando  riquezas monumentales, artísticas, inmobiliarias y económicas. Y ha tenido la agilidad de no conservar la pobreza primitiva sino que ha sabido evolucionar hasta la posesión de un poder financiero notable y de accionariado en múltiples multinacionales. No se ha refugiado en la revelación de la palabra sino que se ha apropiado vergonzosamente  riquezas de todo tipo. Desde el platero de Jesús hasta el papamóvil hay una evolución notable. Desde el desprecio al nazareno hasta los armiños que reciben honores militares hay una distancia.

España es un estado no confesional constitucionalmente. Es verdad que una gran mayoría de españoles se confiesan católicos. Pero esta adhesión no invalida la aconfesionalidad. Son compatibles. Por eso debería ser también compatible y exigible que la Iglesia se abasteciera económicamente de sus fieles. El estado español aporta una cantidad de dinero que, si bien está comprometida por un desfasado concordato, debería partir de la propia Iglesia la renuncia a esa aportación y debería a su vez el gobierno de turno denunciar por superado ese concordato.

Estamos en un momento de crisis. Hay millones de parados. Hay hambre. Hay mayores cuyas pensiones no llegan para hacer frente a los gastos elementales de una vida. Hay dependientes, minusválidos necesitados de un abrazo que les ayude a vivir. Se ha impuesto el repago sanitario, se desahucia diariamente dejando sin techo acogedor de amor. Hay jóvenes sin futuro, viejos arrepentidos de su pasado. Hay miseria.

Y mientras tanto, la Iglesia no tiene la gallardía de renunciar ni los gobiernos de suprimir todo ese dinero que se va en surtir la economía de una institución absolutamente respetable, pero que lo sería aun más si tuviera una actitud comprometida con el mundo que le ha tocado vivir.

La Iglesia no puede aferrarse ni a una doctrina que asegura faltando a la verdad que es inmutable ni a unos privilegios que sólo le pertenecen como herencia de una prostitución histórica.




lunes, 21 de mayo de 2012


CONDENADOS


 Jordi Evole, el 20 de Mayo, en la Sexta Televisión, nos presentó su programa SALVADOS. Dialogó con un profesor español en Atenas, con una traductora española en la televisión griega, con comerciantes, pensionistas y trabajadores griegos. Y los distintos estamentos nos brindaron un país condenado. Ya en España, Evole conversó con un economista que clarificó los orígenes y consecuencias de la crisis y finalmente entrevistó a Federico Mayor Zaragoza que me condujo a que el título del programa, por esta vez, estaba mal elegido. Deberían haberlo titulado “CONDENADOS”. Porque a una condena están abocados aquellos países que, como el nuestro, han sido el blanco de la codicia, la usura y la especulación de los depredadores económicos.

A la ciudadanía se le echa en cara que la actual situación es la consecuencia lógica de haber vivido por encima de sus posibilidades. Hemos tratado de tener un techo donde albergarnos como familia. Compramos un coche para tener cierta libertad de movimientos. Y nos fuimos quince días a una playa a recomponer la cabeza para volverla a entregar a un trabajo del que vivíamos. Y antes de todo pasamos “por un banco amigo” para decirles que necesitábamos algo de dinero para vivir por “encima de nuestras posibilidades”  Radiografiaron la nómina, nos dieron el dinero y un mantel con servilletas bordadas para celebrar que ya estábamos hipotecados de por vida. Salimos contentos de nuestro encuentro con el director  y el banco amigo empezó a cerrar el nudo sobre nuestra garganta. Desde entonces estábamos viviendo por encima de nuestras posibilidades.

“Los niños son el colectivo más pobre en España. El 26% de los chicos y chicas menores de 18 años vive en hogares que están por debajo del umbral de la pobreza,  En total, son 2.200.000 niños y niñas, casi 205.000 más que hace dos años” Lo escribe Gabriela Jonquera en Público. "Los grupos más vulnerables, como los jóvenes, las familias inmigrantes, las familias con miembros que podrían estar trabajando y que ahora todos se encuentran en paro, tienen más posibilidades de caer en la pobreza"

Las guerras han cambiado de estrategia. Ya no se conquistan las tierras por las armas sino por la economía. Si un país no paga su deuda se le interviene, es decir, se lo apropia el acreedor asfixiando su economía, cobrando su producción, condenando a sus habitantes a trabajar para el conquistador, hundiendo a su población en la miseria más absoluta, obligando a apartar la mayor cantidad de dinero para pagar la deuda sin tener en cuenta la miseria, el hambre, la destrucción sistemática de sus habitantes. La gente se suicida, abandona a sus hijos porque no tiene para darles un trozo de pan y duerme en las aceras porque le han quitado hasta el techo que arropaba el amor de cada noche.

Aún así, dicen los economistas, ciertos países no llegarán a cubrir su deuda en muchos años. Al final seremos países fallidos de cara al acreedor. Pero se ha condenado a esos pueblos a una marginación histórica de la que no podrán levantarse. Se ha conquistado sin armas de fuego un territorio. Sin armas de fuego pero con muchos muertos. Con ilusiones fusiladas, con niños analfabetos, con viejos desengañados, con familias rotas, con trabajadores-esclavos. Y si caminamos hacia esa frustración vital, ¿no sería más realista plantar cara a la usura, a la cacería y hacer retroceder a los conquistadores? Ha habido hasta hace poco dos bloques, decía Mayor Zaragoza: el comunista que ya acabó y el capitalismo con el que hay que terminar. Es una crisis sistémica. Las guerras las hacen los ricos. Los pobres son los únicos capaces de llevar a cabo las revoluciones porque nada tienen que perder. Los países ricos  oprimen y ahogan a los pobres empobreciéndolos más. Son estos pobres los que están llamados a poner en pié una revolución sin la cual gran parte de la humanidad está destinada inexorablemente a estar esclavizada por una minoría.

Los gobiernos sólo nos hablan de recortes: sanidad, educación, servicios sociales, sueldos, condiciones laborales infrahumanas, desasistencia a dependientes, cierre de guarderías, disminución de becas, cierre de centros de investigación, más número de parados… Apretarse el cinturón, le llaman.

Pese al voluntarioso título de Evole, nos demostró esa noche que estábamos todos condenados.

domingo, 20 de mayo de 2012


TENIA LA ALEGRIA



Tenía la alegría del agua entre tus manos,
del sueño alojado en tus ojos de espuma.
Tenía la certeza del amor encontrado
en la selva cambiante de la memoria huida.
Te quiero como a un árbol con  cerezas,
como a un monte goteado de flores dibujadas.
He partido la noche para encontrar tu cuerpo,
he profanado el vientre de una luna sin alma,
me he perdido en los brazos del viento.
Pero tú eras la sombra, sólo sombra
de un río boca arriba, hueco de agua y de recuerdo.
Le he puesto nombre a tus besos
como si fueran hijos
de una noche alargada,
como si nos hubiera brotado la luna entre los brazos
aquella tarde de abrazos.
Tenía la alegría tanta pena,
tanta tristeza azul entre los labios,
que olvidé tu recuerdo azul tatuado
en la espalda del tiempo para siempre.


jueves, 17 de mayo de 2012


PERSONA NON GRATA



 Las mitras terminan en punta, como lanzas. Mitras punzantes, hirientes que arremeten con la bravura de quien domina el monopolio de la verdad. Ahí están los Obispos depositarios de la verdad del orden natural como camino instintivo del desarrollo humano y de la verdad de Dios apropiado y cuadriculado en los esquemas de la historia estatificada en una ayer sin mañana. Llevan en las cartucheras la verdad cargada de destrucción y apuntan contra todo aquel que se atreve a disentir de su normativa legalista e hipócrita. Han puesto el infierno boca arriba para que a su vientre vayan los que piensen que el sexo es una escalofrío emocionante, que el amor, todo amor, es el asombro glorioso ante la realidad del otro, que la investigación es la búsqueda en las entrañas del misterio. Bajo el acero incombustible de las mitras han encerrado la infinitud definitoria de un dios al que han conseguido encorsetar en la miniatura anquilosada de unas leyes. Han logrado jibarizar la grandeza divina para hacerla manejable y usarla a imagen y semejanza de una jerarquía antitestimonio de projimidad y cercanía. Han desalojado al dios que puso su tienda de campaña entre nosotros como si formara parte de un botellón destructor del orden público.

El Obispo de Tenerife asegura que la pederastia clerical tiene su origen en la provocación ejercida por la chavalería que se insinúa y busca  ser mancillada. El Obispo de Córdoba afirma que la mujer que aborta no tiene derecho a sentirse ofendida si un hombre la viola. Y el Obispo de Alcalá de Henares, envuelto en banderas franquistas, tiene claro que la homosexualidad es una enfermedad que se puede curar porque nace de una desviación adquirida en el quehacer sexual de cada día. La homosexualidad va unida a la prostitución y es el fruto de  "las ideologías que acaban por no orientar bien lo que es la sexualidad humana", hace que ya desde niños tengan "atracción hacia las personas de su mismo sexo", y a veces para comprobarlo se corrompen y se prostituyen o van a clubes de hombres nocturnos. Os aseguro que encuentran el infierno", proclamó.
Asimismo, el obispo aludió a la interrupción voluntaria del embarazo para afirmar que la mujer que aborta "se ha destruido a sí misma" y "ha destruido una vida inocente". En este sentido, dijo que esa persona, llevada por la preocupación, es "tentada" con la idea de abortar.
Las mujeres que han ido a abortar, ha continuado, "llevan el sufrimiento en su corazón y muchas de ellas no pueden dormir y han pasado años y años sufriendo porque el pecado siempre lleva como paga la destrucción de la persona".
No es la primera vez que Reig Pla  es objeto de polémica. El 27 de diciembre de 2010 vinculó la violencia de género a la perdida de la familia tradicional. Dijo que se da sobre todo en aquellos procesos de separación y divorcio, "de manera que los matrimonios canónicamente constituidos tienen menos casos de violencia domestica que aquellos que son parejas de hecho o personas que viven inestablemente".
Las fuerzas progresistas del Ayuntamiento de Alcalá de Henares han solicitado que el Obispo sea excluido de los actos oficiales porque en ningún momento ni ante nadie es digno de representar a la ciudadanía. Pide además a la autoridad eclesiástica que corresponda que lo traslade a otra sede episcopal y que sea declarado persona non grata por las autoridades municipales.
Por su parte el obispado ha emitido una nota en la que se defienden las aberrantes afirmaciones de “nuestro padre y pastor”  porque no ha hecho otra cosa que exponer la doctrina de la iglesia católica y defender la verdad, algo que seguirá haciendo con la ayuda de Dios y argumentando que ninguna autoridad está por encima de la de la Iglesia.
Desde el vértice de su mitra punzante, el Obispo se declara perseguido, depositario despótico de la verdad absoluta y exige que ante su aberrante magisterio se arrodille todo ser humano carente de derecho a pensar por sí mismo.

La Jerarquía española no asume que el palio se ha quedado vacío, que el revuelo de sotanas no aletea en el Parlamento, que Dios fue de derechas cuando la santa cruzada y que hay cristianos que le exigen a ese Dios que viva comprometido con los problemas del mundo y especialmente con los pobres.

El evangelio, la ciudadanía y la decencia de una sociedad debe proclamar que muchos obispos son personas non gratas en un mundo laico que trata de construirse a sí mismo, no desde la sumisión cristiana

lunes, 14 de mayo de 2012



R.R.



Responsabilidad se escribe con R. Ser responsable es tener la capacidad de responder por el otro, dar cuenta del otro. Cuando uno no sabe qué ha sido de la vida del hermano se convierte en irresponsable. El irresponsable traiciona, da la espalda porque no tiene el valor de mirarle a los ojos a la realidad que él ha construido al margen o contra el otro. Se nos mueren las flores porque el abandono las destruye. Nos quedamos sin primavera porque nos deslumbra la luz limpia de las rosas.

BANKIA se ha roto. El vaso donde beben diez millones de españoles se ha hecho añicos. Quedan los cristales diseminados como trozos de pena, como restos de desengaño, de desilusión. Moléculas de frustración clavadas en el ahorro, en el sudor de la vendimia de Francia, de la recogida de naranjas, del vareo de aceituna en la luz fría de Andalucía. Anda por ahí Rajoy de la mano de de Guindos. Montoro mira con  sonrisa de extraterrestre y permanece escondido detrás de la sombra inexplicablemente alargada de Soraya. Nada dice Montoro que llega tarde a su puesto en el Congreso porque el último apretón estomacal lo sorprendió como un déficit heredado de Zapatero y Elena.

BANKIA no tenía que haberse casado. Llevaba bien la soledad. Lo dicen los entendidos en sentimientos de dinero. Le sentó mal el levante arruinado y el primer amor se arruinó desde el beso primero. ¿Consumaron o no consumaron? Yo lo ignoro pero sospecho que amarse en una CAJA no es lo mismo, no puede ser lo mismo, que hacer el amor en un SIMCA-1.000.

Rodrigo Rato no es. Sólo fue. Vicepresidente-aspirante-con-Rajoy-estorbo. Ministro de las economías por tierra, mar y aire. Jefe de Estado del Fondo Monetario Internacional. Un día tomó el avión privado, se vino a España “por razones personales” y la banca mundial empezó a crujir como un arcón apolillado. De él salió la crisis y la vida empezó a cotizar bajo mínimos. Rodrigo Rato sólo fue. Pero ya no es. Millonario de indemnizaciones por haber sido. Ser sólo millonario es bastante triste.

Andaba Rato pidiendo en la puerta del gobierno. Si Rajoy le había dado una patada con el tacón de Cospedal, debía llamarlo ahora para condecorarlo por los servicios prestados. Guindos-ministro remendó  la solapa y quiso prenderle un Repsol con su banda de petróleo negro a juego con la negritud de un luto BANKIARIO recientemente estrenado. Y D. Rodrigo, el que sólo es lo que fue, queriendo volver a ser. Pié en la espuela. Pidiendo que lo empujen porque está alto el caballo, porque habrá que descabalgar a alguien, porque él nunca tuvo sitio donde había otro, porque se siente único, con derecho exclusivo a mirar la campiña desde la altura de lo que fue.

A Rato le preguntan todos. Rato no responde. El fue gobierno. Y los gobiernos tienen la garantía del silencio. En él se embozan, como en una capa española. Nadie los reconoce. Llevan la espada debajo, oculta. Te colocan de espaldas a la pared y mandan. Y a obedecer. Dicen que es la ley. Que una vez elegidos tienen derecho a no responder a las preguntas impertinentes de la ciudadanía. Como hace Rato. Le están calzando las polainas para subirse a Repsol. R.R. Rato-Repsol. Suena bien. A lo mejor Cristina-argentina-presidenta no se atreve. Mientras Rato se abraza al silencio. Las preguntas no tienen por qué ser respondidas. Pertenece el mutismo al misterio de la vida. La vida es una interrogante sin respuesta. La vida es irresponsable como D. Rodrigo.

Suena bien R.R. Parece un timbre de alarma, una sirena de fuego posible, de terremoto que se acerca. Pero todo se serena con el silencio impuesto. No hay respuestas.

A lo mejor no existió BANKIA y todo fue un invento de Rajoy para mutilar la educación, la sanidad, la dependencia.


viernes, 11 de mayo de 2012


FUERON ENTONCES LOS BESOS



Me tienes que explicar aquellos besos,
la distancia insalvable de tu boca a mi boca.
Fue tal vez  culpa de la luz
que nos ató los labios
con el agua trenzada, horizontal y limpia.
Después vino la noche como un gato erizado.
Mi boca sin tu boca
se despeñó sombra abajo.
Sin tu cuerpo mi cuerpo
se oscureció
y el gesto se hizo piedra,
postura de mármol definida.
Quiero hacer del futuro
un regreso a los besos,
a tus labios de luna entreabierta,
de agua de par en par
para apoyar la vida
en tus ojos de viento estremecido.
Me tienes que explicar aquellos besos
para entender tu huida, tu regreso, tu llegada
a mi plaza interior llena de árboles
para dormir tu cansancio.
Hice de la espera una esperanza,
asomado al balcón del agua antigua,
donde hicimos del beso
un reguero de caracolas,
de brazos imantados,
de encuentros de alegrías.
A tu lado. A mi lado.
Otra vez con la historia
en las manos del tiempo,
sin que me expliques nada
porque los besos son
la redondez del mundo,
la esfera que empieza la existencia redonda
sin principio ni fin.
Me basta con los besos
inexplicables siempre
salvando la distancia
entre tu boca y mi boca.

miércoles, 9 de mayo de 2012


PIEL DE ARENA



Ya no tengo derecho sobre tu piel de arena.
Me has echado a la cara el ayer destruido,
el tiempo derrumbado.
Sin mañana el mañana,
suplicando esperanza en cada esquina.
Quiero ser el ayer,
con las manos cuajadas de tus venas,
vencido el cuerpo
por tu cuerpo de acero
por tus labios clavados,
por la gótica ojiva de tus ingles.
De recorrerte vengo.
Camino soy desde entonces,
huella con raíces en tus ojos,
con la sombra olvidada entre tus manos.
Un hombre sin sombra no es un hombre,
es tan solo una mueca,
una burla, un gesto retorcido.
A lo mejor mañana,
si hay mañana,
me encuentro con tu recuerdo
crecido entre los pinos,
vertical como un grito
de carne entusiasmada.
Entonces recobraré tu cuerpo,
tu piel de arena morena,
hacedora de tiempo recobrado
y pintaremos ríos en la hierba
para atarnos las bocas con el agua
y convertir los esqueletos grises
en manojos de flores conquistadas.

domingo, 6 de mayo de 2012


YO NO SOY DEFICIT




Me he mirado al espejo esta mañana y he llegado a una conclusión de que yo no soy déficit. No estoy en deuda conmigo mismo porque la palabra, la libertad, el derecho al trabajo, a la salud, a la educación, a la vejez me los he otorgado desde dentro, desde mi propia hechura humana. No son regalo de nadie y por nadie están hipotecados. Nadie puede en consecuencia embargarlos, expropiarlos, usurparlos porque entrañaría un ataque directo al ser que soy, a la intimidad que soy, al proyecto que soy.

Cuando los gobiernos piensan que están por encima del ser humano se convierten en dictadores, en campos de concentración donde se desguaza la aventura de ser hombre para convertirla en piezas aprovechables con las que se puede comerciar para sacarle una rentabilidad y entregarlas a quien las compre para su mejor beneficio y aprovechamiento. El capitalismo se convierte así en un inmenso almacén, perfectamente clasificado, un mercado inconmensurable al que puede acudir el dinero y convertir en ganancias lo que es inservible aislado del conjunto del negocio. Los que disponen del dinero se creen con el derecho a comprar al que no lo tiene. Y el que nada tiene se entrega porque el estómago es un grito con ecos desesperados.

Una vez apropiado en la infame subasta de la pobreza, del hambre, de la miseria, el capital se arroga la prerrogativa de otorgar trabajo, salario, disponibilidad, despido, alteración de horario, destino espaciotemporal y todo aquello que exige la ganancia de quien se atribuye la propiedad frente a la mercancía, pura mercancía, pagada al precio de antojo o de mercado en rebajas.

Hay crisis, dicen. Y en el vientre de esa crisis crece el chantaje como arma pendular que va y viene sobre el mundo del trabajo. El empresario sostiene que da de comer a quince familias cuando la realidad es que quince familias dan de comer al empresario. El que posee el dinero crea país, cuando en realidad quien hace crecer al país es el trabajo o en el mejor de los casos la simbiosis de ambos. El dinero sin trabajo es una joya guardada en un cofre. El trabajo es el que da al dinero capacidad de lucirse y de adornar la vida. El que está en la cúspide nunca se sostiene a sí mismo. Necesita siempre de quien lo mantenga sobre sus espaldas.

Hay crisis, dicen. Y lo que llaman reformas son medios de destrucción de unos derechos que no son otorgados por el capital ni por gobierno alguno. Y por tanto cuando son recortados se convierten en derechos agredidos, expropiados, atacados. Y es lícita la rebelión, estricta necesidad la reclamación y autodefensa la exigencia de su devolución.

 Hay crisis, dicen. Y amparados en esa crisis los gobiernos fabrican 24 millones de parados en Europa,  de los cuales seis corresponden a España. Han estrujado los sueños, las esperanzas, la alegría y los estómagos de 24 millones de personas, atadas a sus familias, a su salud, a su educación, a su vejez, a su dependencia. No resulta digerible que esos desahuciados de la vida paguen una crisis de la que no son autores ni que sus vidas sean inmoladas en el altar del euro, de la prima de riesgo, de los mercados o de Merkel emperatriz. ¿Se acuerda alguien de que se iba a refundar el capitalismo? Sarkozy construyó la frase (no llegó a la categoría de idea) y se olvidó cuando el capitalismo le susurró que ya era lo suficientemente perverso como para añadirle nuevos adornos. Un día Merkel tiró a la basura la refundación e impuso criterios decisivos que demostraran las consecuencias de una realidad dominante y dominadora. Y en esas estamos. Europa tiene un eje alrededor del cual gira hasta el mareo, el vómito y el desmayo definitivo.

Hay crisis, dicen. Pero deberíamos tomar conciencia de que el elemento que puede solucionarla nunca puede pasar por encima de lo humano. Europa no puede ser una simbiosis de látigos y de elegantes esclavos de corbata hipotecada, de coche hipotecado, de vivienda hipotecada sometido al contrato del miedo. Nos estamos quedando sin libertad, sin opciones libres de voto (pregunten por Grecia o Italia) Incluso cualquier gobierno salido de las urnas está sometido a los designio supremos de la moneda. Los gobiernos no gobiernan. Simplemente podan el jardín para que posen sus pies manchados los mercados vestidos de limpio.

No somos un déficit. Somos la grandeza de quien posee una fuente interior de derechos que nadie puede arrebatar. Y si alguien lo intenta debería verse las caras con una humanidad puesta en pie como un  río rebelde.