RESPIRAS
Respiras exigiendo
todo el aire del mundo.
Te cabe la vida
laringe abajo
hasta el estómago que rumia
soledades concretas
Llevas tacones de bruma
para poner el infinito
al alcance de tu mano
Comprendo la dimensión
de ese mañana horadado.,
escarbado en una mina sin
nombre,
pero monte,
entraña,
vientre de granito
impenetrable.
Conseguirás el mar
que está dentro de cada
cordillera.
Adjudicarás las olas
a la ambición de tus ojos
y te rendirás al fin
a las ingles de la tierra.
Serás entonces
arena enamorada,
polvo amante de noches
perpetuas
que subleva los ojos
de quien te mira de frente.
Respiraré tu luz,
tu desnudez provocada,
tu carne de amapola
taponando la soledad de mi
sangre.
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