sábado, 19 de diciembre de 2009

LA NIÑA ALEGRIA

 Con el cariño de hoy y desde la honradez de la palabra,

                                        a los seguidores de mi blog.




Hay que cuidar la alegría. Como hay que cuidar los geranios, la nostalgia, o el amor encontrado de repente en los labios calientes de la vida. Ahora la venden envuelta en celofán, elegante como un río diminuto, envasada al vacío, pura, sin conservantes ni colorantes. Así está en las tiendas de lujo, en los escaparates soberbios del consumo. Alegría a granel, por encargo, alta de precio, que bajará en enero, porque en enero ya no será última moda.


En diciembre se impone la alegría. Se iluminan las noches de los pueblos. Luces breves en cestitos pequeños, como si la gente llevara un amanecer entre las manos. Las grandes ciudades, no. Ellas necesitan demostrar su prepotencia. La luz chorrea desde los árboles, por las paredes. Hay aceras de luz, asfalto de luz, tejados de luz. Se diferencia el centro urbano de los suburbios de chabolas. La luz es patrimonio de los ricos, de las clases medias altas, nunca de los pobres. Los pobres tienen sólo derecho a la oscuridad, a enganchar la pena al generador de penas grandes, sin que se entere la guardia civil, porque a los pobres se les multa incluso por tener penas.

Hay que cuidar la alegría. Caduca pronto. “Consumir preferentemente antes del seis de enero”. Después intoxica, amarga. Se mueren los ángeles que lleva dentro. Y una alegría sin ángeles es como un puñado de jazmines sin tuétanos de aroma. Qué triste la alegría. Tan deseada. Tan manoseada. Tan impuesta. Tan prostituida. Con la fecha de su muerte ciñéndole la cintura. Cinta negra en el pelo de la alegría.

Hay que cuidar la alegría. Como a una especie protegida. Pero sólo en diciembre. Lo ordena un real decreto de las estrellas. Firmado por Belén. Ternura de niño testigo. Pastores. Camellos. Vírgenes azules y trabajadores de garlopa. Asombro de Reyes Magos. Pudor de mujer parida. Primeriza. Con cruces pequeñitas por la sangre. Ríos papel cobrizo. Plateros humildes por los caminos de corcho. Vacas chorreando cariño caliente. Gitanitos paseando las noches, noches nocheras.

Pero a nadie le importa el misterio del hombre. Sólo la alegría. Porque se acaba pronto. Seis de enero. Caballitos de cartón y pelotas de plástico en el chabolerío del suburbio. Trenes electrónicos, universo digital por Gran Vía y Velázquez. Porque la alegría no es igual a la alegría. No confundir el barrio de Salamanca con el cartón piedra de las afueras.

Navidad es el hombre. Naciendo de sí mismo. Creándose. Proyectando futuro. El hombre inaugurando su propia humanidad. Poeta de día séptimo. Sin descanso. Abriendo el vientre de la luz. Indagando la propia identidad para poseerse y entregarse. Dándole a cada hombre su ración de hombre. Dignidad igualada. Sin primacía posible. Creyendo en el tú adorable, en el belén del otro. Dólares al margen, guantánamos clausurados, petróleos blancos de azucenas, entrega de cuerpos abrazados. Crucecitas cicatrizadas en las venas de la virgen primeriza. Madera honrada para la gubia de tanto josé obrero.

Porque Navidad es el hombre, hay que cuidar la alegría. Que no se acabe en enero. Hay que ponerle pañales de mugidos tibios y burritos pequeños y peludos.








sábado, 12 de diciembre de 2009

LAS ROSAS TAMBIEN SE PUDREN

Mediante la palabra, el hombre saca fuera de sí toda su verdad para que pueda ser acogida por el otro en su plenitud. La palabra es ex-posición. El ser humano se entrega en la palabra, se hace donación gratuita, regalo dialogal. En esa entrega va comprometida toda la autenticidad que se alberga en los adentros.


Si lo anterior es verdad, deberíamos preguntarnos qué significa la palabra cuando la pronuncia un político. ¿Por qué cuando el político habla prometiendo, criticando, aportando, no compromete su intimidad? Puede mentir, falsear la realidad, disfrazarla sin que vuelque sobre ella el más mínimo rasgo identitario. Lo expresado por un político y por alguien ajeno al quehacer público cobra distinta dimensión. Al segundo no le permitiríamos ciertas manifestaciones en nuestra presencia. Al primero lo comprendemos porque habla desde una ideología que aspira al poder o a mantenerse en él. La palabra se desconecta del que la pronuncia y nada tiene que ver con su dimensión personal. Se la descoyunta, se la fusila y ninguna responsabilidad recae sobre quien dispara el tiro de gracia.

Más grave es aún el tema de la corrupción. Un político es corrupto sólo cuando se apropia del dinero que nos pertenece a todos o malversa un patrimonio que a todos nos atañe. Luis Roldán fue un corrupto, nadie lo niega. Aznar es un honorable ex presidente, aunque nos mintió sobre la existencia de armas de destrucción masiva en Irak. Uno se llevó dinero. Otro destruye la palabra. Roldán ha estado o está en la cárcel. Aznar se pasea dando lecciones magistrales por el mundo. Nos duele el euro más que la palabra. Esta inversión de valores desquicia la vida y destroza el quehacer humano.

Según María Dolores de Cospedal "la falta de una posición coherente, fuerte y firme, en muchos temas, quizás induce a pensar a algunas organizaciones terroristas que podemos ser presa fácil". Por su parte Esperanza Aguirre dogmatiza: “La política exterior del Gobierno de España desde que la preside Zapatero hace que nos tomen por el pito del sereno. Los piratas somalíes, los cooperantes catalanes secuestrados en Mauritania. Aminatou Haidar venía de los Estados Unidos. Se le debería haber devuelto allí, y en vez de eso nos la mandan a España”

Cospedal y Aguirre, corrompiendo la palabra, andan sueltas sin orden alguna de búsqueda y captura. Para destrozar a un gobierno no les importa, como no le importa a Aznar, destrozar, humillar, criticar a España. Tan nacionalistas ellos, tan patriotas, tan defensores de la unidad inquebrantable de la patria.

¿Respetables opiniones políticas? Las actitudes miserables nunca son respetables. La democracia, la libertad de expresión son algo más que la impunidad destructiva de ciertas posiciones. Nada tiene que ver con lo que afirmábamos en el principio de este artículo. Los políticos tienen que ser honestos en cuanto al dinero. Pero sobre todo hay que exigirles honradez en cuanto a sus palabras. Atribuir a Al Qaeda la perspicacia de secuestrar a unos constructores de la humanidad culpando a un gobierno de las consecuencias de un secuestro es una actitud miserable.

Y Mariano Rajoy, como siempre: sin inmutarse. Anestesiado con el hedor de ciertas rosas podridas.



sábado, 5 de diciembre de 2009

FUIMOS NIÑOS

Fuimos niños de posguerra. Cartilla de racionamiento. Chocolate de arena con pan duro. Primeros viernes y sábados marianos. Cruzados eucarísticos y luises virginales. Monaguillos rojo y blanco. Escolanías blancas de alabanzas al dios-niño, al dios-doliente, al dios-milagro, nunca al dios-resucitado. Se gestionaba mejor el dolor que la alegría. Doctrina cristiana los domingos. Mandamientos de la Ley de Dios musicados como la tabla de multiplicar del siete. Primera comunión de marinerito o almirante entorchado si eras rico. Pomanlloanmilipapá, nemotecnia de bienaventuranzas anestesiantes, válidas para un reino de consolación, ultramundano, nunca de energía profética. Los pobres, los que lloran, los que sufren son los cumplidores de la voluntad de Dios. Eran más dichosos en este mundo los ricos, los poderosos, los que olían a heno de pravia y varón dandy. Bienhechores perpetuos regalando fincas a monjas pedigüeñas, erigiendo monumentos a Franco y al sagrado Corazón, condecorando Macarenas y Trianas morenas de verde luna.


Niños de posguerra fuimos. Niños-pecado. Con amistades particulares peligrosas de homosexualidad incipiente. Niños-pecado que miraban el jersey de quince años con imaginadas palomas interiores.

-Padre, me gusta una vecina.

-No digas eso, hijo. Las mujeres están puestas en el mundo para hacernos pecar. Sucedió con Eva y ella fue la culpable de la muerte de Cristo. Si es necesario, arráncate los ojos, porque más vale entrar ciego en el reino de los cielos que…

-Padre, a veces me acaricio el alma.

-Eso es un pecado terrible. Haces llorar lágrimas de sangre al Sagrado Corazón y matas nuevamente a Cristo. Jesús vuelve a sufrir toda la pasión por tu culpa. Además debes saber que ese pecado de la carne hace que se reblandezca tu médula espinal y podrías llegar a quedarte paralítico y afecta a tus meninges y te volverías tontito para toda tu vida.

Y uno se marchaba atormentado, con miedo a mirarle la cintura a la Giralda. ¿Era aquello cristianismo o sólo adoctrinamiento sectario, obscurantista? El dios-hombre-del-saco, el dios-látigo, nunca la visión liberadora de un mensaje creador.

Lo que de verdad preocupa al Arzobispado de Madrid es la posibilidad de que el Ejecutivo implante “de forma obligatoria en todos los centros escolares” una asignatura sobre educación afectivo-sexual. “La mal llamada educación afectivo sexual ni educa ni trata de los afectos, aunque sí tiene tal carga sexual que roza la perversión de menores”. “Del amor y los afectos ni palabra. Quizá fuese más propio empezar a utilizar la expresión educación pervertido-sexual”, insiste la publicación Alfa y Omega del Cardenal Rouco.

La Jerarquía aboga por un derecho a la educación religiosa en todos los niveles, pero nunca por una educación sexual. El sexo –se deduce- no pertenece ni al ámbito religioso ni siquiera al humano. Sólo está presente entre las ingles de los cerebros episcopales. Los Obispos –sólo ellos- tienen la capacidad para salvar y condenar al prójimo en base al principal y casi único pecado existente: el relativo al sexo. El Cardenal Javier Lozano Barragán ha llegado a afirmar que los homosexuales y transexuales no entrarán en el reino de los cielos.

¿Pueden los Obispos seguir hablando de adoctrinamiento?



sábado, 28 de noviembre de 2009

LA IGLESIA ES ASI

El 20-N fue ayer y es hoy. ¿Será mañana todavía? Mañana del 75, con el frío hasta las ingles en la plaza cristiano-mora del Pardo. Trombos de hielo en las ramas. Franco desfilando hacia la muerte, hacia la nada, entre lágrimas-Plaza-Oriente y libertad de pueblo estrenada. Se llenó de capas pluviales, de mitras enlutadas, de gritos fusilando a Tarancón. Fue ayer.

Valle de los Caídos funerario. Granito-crespón-negro. Cara al sol remangado contra el frío. Historia de ojeras gris marengo. Julián Melero besando banderas que incuban aves carroñeras. “La besaré siempre porque me siento orgulloso de ella. La Iglesia es así” Lo dice Julián Melero, cura agradecido de San Francisco, flanqueado por Franco y José Antonio. 20-N es hoy.

¿Será mañana todavía? Le cuesta a la historia reponerse de tanto encefalograma plano, de tanta puñalada albergada durante cuarenta años, de tanta hemorragia de odio. Franco no hizo historia, sólo fabricó pasado. Algún día –es urgente- dejará de ser 20-N.

Mientras tanto persisten Rouco, y Martínez Camino y Munilla pisando amores homosexuales, regresando de País vasco a vascongadas. Nacionalcatolicismo condenando. Los políticos, muchos políticos, en estado objetivo de pecado. La Iglesia objetivando al hombre, privándole de dinamicidad. Diciendo sólo lo que siempre ha dicho, sin creatividad alguna, sin devenir. Dirigiendo el paso alegre de la paz. Una Iglesia excluyente, marginando a quienes elegidos por el pueblo marcan un rumbo homocéntrico. El teocentrismo se acabó hace treinta y cuatro años. Es pasado, sólo pasado. Ojalá nunca historia.

Políticos, votantes, democracia en el fondo, relegados al estado objetivo de pecado. Queda sólo la decencia de la Jerarquía. ¿Hablamos de Irlanda? ¿Hablamos de la diócesis de los Angeles? El Cardenal Roger Mahony pidió perdón por esos abusos sexuales. Pero resultó vergonzoso que no pidiera perdón por tener una disponibilidad económica de 500 millones de euros para indemnizar a las víctimas.

Juan Pablo II le dio la comunión a Pinochet. Con televisión urbi et orbe. A lo mejor porque no mataba inocentes, sino a sencillos allendes que tomaban mate caliente para entonarse las vidas.

No se le negó la comunión a Videla porque mataba sólo a hordas marxistas. Se abrían las panzas de los aviones y caían al mar cientos de víctimas, absueltas de sus pecados por un capellán castrense que viajaba en la cabina de mandos.

En España los fusiles andaban bajo palio, mientras las cunetas cicatrizaban ante madres y novias, para siempre novias y madres. Nadie tuvo báculos suficientes para negarle la comunión al diácono de la Santa Iglesia Francisco ni para taparle la boca a Quiepo que escupía semen contra ingles virginales.

Los Obispos españoles han vivido –por edad- todas esas etapas. Muchos lo son a propuesta del católico general. Cuarenta años postrados ante sus botas, sacando brillo a los sables homicidas.

No hablo desde ningún resentimiento. El virus de Trinidad ministra puede cerrarme los pulmones grises de nicotina. Cualquier día uno se muere sin entender la poesía del viento. Pero tiene derecho a exigir que mañana no se 20-N.

LA IGLESIA ES ASI. Lo dice el cura Melero que besa banderas de nostalgia.


sábado, 21 de noviembre de 2009

AZNAR CONTEMPLATIVO

José María Aznar no fue invitado a la convención nacional del Partido Popular celebrada en Barcelona. Mariano Rajoy, presidente, (lo de líder todavía está por ver), justificó la no invitación porque la cita era “para las personas que estamos en política activa en este momento”


Aznar optó por la postura del zorro que no alcanza las uvas que ciertamente le apetecen: las desecha porque no están maduras. Eso viene a significar la justificación que encuentra para no ser invitado: “Yo estoy fuera ahora mismo de la primera línea de acción política. Pero sigo manteniendo un interés despierto en lo que pasa en la política aunque ahora centre mi actividad en algo que siempre he considerado de la más alta importancia: las ideas. Cualquier proyecto político sin ideas, es una cáscara vacía que seguramente no tendrá nada que aportar”

Los politólogos celebraron –al fin- la independencia freudiana de Rajoy. Por fin el partido era uno, grande y libre. Lo proclamaba Cospedal: un solo partido, un solo proyecto, un solo líder. Ausente Esperanza por enfermedad familiar, ausente Aznar entrenando pectorales, ausente Camps. Lo vieron junto a Rita huyendo, ellos sabrán de qué, en un ferrari, nadie sabe hacia dónde.

Hace tiempo que la Iglesia proclamó que la vida contemplativa era superior a la vida activa. El silencio monacal, la lejanía del mundo, la distancia con los problemas de la pobreza, del hambre, de las injusticias, llevaba más fácilmente a los monjes al encuentro con un Dios nunca hecho carne, compañero y prójimo. Por el contrario, los teólogos de la liberación, los volcados sobre estómagos vacíos, los profetas revulsivos, tendrían sin duda más dificultad para vivir a fondo su cristianismo.

Aznar ha dado el paso definitivamente salvador. Del activismo entrañable con Buhs, del ajetreo bélico de Irak, de la gloriosa reconquista de Perejil, ha pasado a la sublime importancia de las ideas. Aznar piensa, profundiza, indaga. Por eso llega a conclusiones luminosas que fecundarán el futuro de la historia. Los procesos migratorios y el “abrupto” descenso de la población activa obligarán a ampliar la vida laboral de aquellas personas “que puedan seguir trabajando”. “Habrá que estimular la natalidad, incrementar la productividad y evitar los abusos en los sistemas de protección social” y habrá que limitarles los gastos sociales y sanitarios. De lo contrario terminarán con el estado de bienestar. El fenómeno migratorio está identificado con la delincuencia. Los inmigrantes deben convertirse a los valores judeocristianos e integrarse en una Europa profundamente cristiana en sus raíces y en su evolución. Europa necesita “menos regulación y más mercado, menos proteccionismo y más apertura, menos intervencionismo público y más iniciativa privada”. “El mercado abierto y libre es el mayor motor de progreso que existe”

Aznar, san Aznar, está ya instalado en el estadio más perfecto de la vida. Bajo la gloria de Bernini descansan las ideas que preceden. El Aznar contemplativo rezuma semillas de historia, de horizontes confortables, de futuro enriquecido. Aznar, san Aznar, es izado a las alturas por Buhs, Margarita de Inglaterra, Murdoch, Gianfranco Fini y Berlusconi.



Aznar, san Aznar, no te acuerdes de nosotros. El mundo vale la pena incluso sin ti.





jueves, 19 de noviembre de 2009

IGLESIA: ENTRE EL AYER Y EL MAÑANA

Una sociedad viva trasciende siempre su propia estructura jurídica, la que se ha ido dando a sí misma de forma voluntariamente mayoritaria. Pero el pueblo va siempre por delante de la ley abriendo caminos, haciendo futuro, acomodando postura al desarrollo evolutivo. Cuando hace de de su código una norma definitiva, se cosifica, se inmoviliza y reposa sobre su propia mortaja. Lo humano sin devenir es una contradicción in terminis. El hombre vive la provisionalidad de su presente enriquecido por la luminosidad de su futuro. Si concibe su precariedad ontológica y temporal como dato absoluto se instala en la muerte. El rico epulón afirma su conciencia de suficiencia existencial en la quietud terminal de su presente. Esa misma noche le asalta la muerte como oscura espalda del futuro. Pretender ahorrarnos la tarea poética del mañana nos remite al metro y medio de tumba definitiva.


Mons. Martínez Camino, portavoz de la Conferencia Episcopal, ha hablado en nombre de la Iglesia anatematizando el proyecto de ley sobre el aborto. Ha sido tajante, como suelen ser los obispos cuando hablan: los políticos católicos que voten, apoyen o difundan esta ley se convierten objetivamente en pecadores públicos y por tanto no pueden ser receptores de la comunión. Quitar la vida entra en contradicción con la fe católica y en consecuencia caen en la herejía y en la excomunión que lleva aparejada.

Rouco Varela y la mayoría de los Obispos apoyan estas declaraciones de Martínez Camino. Y en las tertulias televisivas y radiofónicas se llega de forma unánime a la misma conclusión: La Iglesia dice siempre los que siempre ha dicho. Esta aparente obviedad encierra una concepción estatificada de la Iglesia. Estatificación a la que aspira siempre la Jerarquía cuando apela a su núcleo fundamental. Está basada en el derecho canónico. Lo proclama el propio portavoz episcopal. Lenin y Hitler, comunismo y nazismo instalaron el aborto como arma selectiva y ocasionaron un holocausto del que la humanidad vivirá siempre avergonzada.

¿Puede la Iglesia fundamentar su existencia en una normativa estrictamente jurídica? ¿No está en ese intento envolviéndose endogámicamente sobre sí misma y negando su proyección al mundo y al tiempo que en cada etapa histórica le toca vivir? ¿Ignora deliberadamente el Concilio Vaticano II? ¿Puede sincera y honestamente basar muchas de estas tesis en el evangelio? Lo ha pretendido de forma constante, pero su esfuerzo ha sido inútil. El evangelio no tiene repuesta para cualquier situación humana porque no se puede reducir a un código de conducta. Cuando cada acontecer humano quiere iluminarse con un párrafo de Cristo se convierte a Jesús en un divulgador de refranes y su mensaje en una colección de proverbios y aforismos tópicos.

Decir siempre lo que siempre se ha dicho no es más que un reflejo de involución, de hermetismo, de falta de proyección en el tiempo. Cuando desde una egolatría excesiva se apela a la revelación divina, al derecho natural como interpretación unívoca y de exclusiva propiedad privada, cuando conscientemente se confunde tradición con inercia, la Iglesia queda convertida en estatua de sal, en incómoda postura de mirar el pasado, sólo el pasado, convirtiendo la libertad viviente del evangelio en contradicción flagrante e institucionalmente aprovechada del ayer como patrimonio esclerotizante.

La Iglesia tiene derecho a hablar siempre que tenga algo que decir a los hombres y mujeres de hoy. Los pétalos disecados pertenecen a libros de nostalgia.



domingo, 8 de noviembre de 2009

POLVO ENAMORADO

¿Conseguirán alguna vez los Obispos caminar hombro con hombro con la humanidad? ¿Optarán alguna vez por la projimidad, la cercanía, la fraternidad? ¿Abandonarán alguna vez la atalaya del poder, la manipulación de la verdad, la prepotencia del saber, el dominio del indomable para ser carne de mundo, entrañas de vida, interioridad vivificante? Porque cuando aspiramos a ser dioses nos convertimos “en pasión inútil” (Sartre). Pero cuando Dios quiere acostumbrarse a lo humano se hace hombre. Su mirada es horizontal y el hombre sólo es salvado desde el hombre. El cristianismo es nada más, pero nada menos, que la importancia del hombre.


La vida es un camino hacia el misterio. La muerte tal vez, sólo tal vez, la posibilidad definitiva de encontrarnos con la verdad última de ese misterio. A lo mejor por eso la sentimos como precipicio insondable, como escalofrío sudoroso de quien ha caminado incansablemente hacia la nada. “El hombre es un ser para la muerte” nos aseguraban los existencialistas. No eran exactos. El hombre es un ser para “su” muerte. Cada uno se muere a sí mismo. Morirse es un verbo reflexivo.

¿Y después de la muerte qué? ¿La futura resurrección de los muertos? ¿El vientre estriado de la nada nunca preñada de futuro? ¿Es el hombre un fruto en sí mismo, inseminado por Dios hacia lo definitivamente absoluto? Que cada cual se responda desde su más interior intimidad. Es cierto que aspiramos a la prolongación de la vida, concebida tal vez de forma excesivamente antropomórfica. Pero es igualmente cierto que el hombre experimenta su muerte como el resumen polvoriento de la existencia capaz de diluirse en una tumba o albergarse en veinte centímetros de urna.

Y aquí aparece Raúl Berzosa, Obispo auxiliar de Oviedo afirmando, con la rotundidad con que hablan los Obispos, que la incineración de los cadáveres va contra la doctrina de la Iglesia. “Los creyentes deben enterrar el cadáver en tierra porque creen en la resurrección de los muertos y porque el cuerpo humano es el templo de Dios” Otra vez los Obispos en la periferia del hombre, nunca en el hombre mismo. Las formas sobre el fondo, el jardín sobre las rosas, la arena sobre las olas. Con el miedo siempre de ser algo hasta el fondo, de adentrarse en el núcleo, de centrar el centro para hacer del cristianismo una experiencia humana y humanizante. Prefieren la ley, la norma, el derecho frente a la libertad infinita como riesgo, apertura y vértigo de existencia.

La resurrección del hombre como reunificación teocéntrica de la vida, nunca como inserción en la universalidad del cosmos al estilo de Chardin. Los profetas de la luz deben permanecer plegados a la quietud jerárquica o desterrados a la inoperancia vital del abismo. Los testigos vivientes sufren una inquisición elegante, pero inquisición al fin. Son relegados a la infidelidad. La creación poética no cabe en la legislación estática mitrada.



Si se nos entierra el pensamiento, déjennos por lo menos morir nuestra muerte inalienable. Queremos sólo ser “polvo, más polvo enamorado”





sábado, 7 de noviembre de 2009

Estabas tú y era Marzo.

La carne se hizo palabra
entre tus pechos azules
y entre el azul de tu enagua.

El muslo largo del monte
en la cintura del alba
ejercía de varón
con su desnudo de gala.

Cumplías la edad del aire.
Tenías dieciocho alhambras,
dieciocho giraldillos
en los perfiles del alma.

Estabas tú y era Marzo.
Aquellas magnolias blancas
me arrastraron brutalmente
hacia tu rosa mulata.

El muslo largo del monte
contra las ingles del agua
creaba estrellas morenas
de seminales galaxias.

Estabas tú y era Marzo.
El viento se enamoraba
del vientre gris de la luna
y la luna se encelaba.

miércoles, 4 de noviembre de 2009

ESPERAME A LAS ONCE

Se fue a la escuela Esperanza. Necesitaba un baño de inocencia, de pureza-Velázquez-cielo azul. Se mezcló con los niños. Globos ingrávidos y babis de vichy. Dientes de leche que no muerden. Acarician el tacto. Sólo acarician.


Espérame a las once. Puntual Mariano. Puño cerrado. Dispuesto a demostrar horas de gimnasio, tabletas-Aznar, postura de líder. Porque Mariano era líder. Se lo repetía a sí mismo. Tomaba conciencia de su poderío. Se lo demostró a Correa, al Bigotes, a Camps, a Bárcenas. Zaplana, Acebes, Estarloa no habían aguantado su mirada de Júpiter tronante y andaban perdidos por la Carrera de San Jerónimo, huérfanos de gaviotas. Por Génova andaban, cruzando el paso de cebra que desemboca en la descatalogación final.

Espérame a las once. Pero a Esperanza le urgía un baño de inocencia, de pureza-Velázquez-cielo azul.

-¿Alguien ha visto a Esperanza?, preguntó Mariano.

-Está con la niña, le respondió Manuel Cobo. Con la niña que soñaste cuando aquellas elecciones, cuando Pizarro era estrella, cuando Soraya aspiraba a portada sexy del dominical, cuando María Dolores domesticaba halcones autónomos.

Mariano se tragó una a una las campanadas de las once sin esperanza, abierto el puño cerrado, sumidas las tabletas-Aznar, flexionado hacia la nada, cargado de cobos, gallardones y ratos-monte-de-piedad-sin-piedad.

Espérame a las once, y a las doce. Llegaré tarde consciente de mi tardanza. Para daros libertad. A lo mejor no llego nunca y os otorgo una libertad duradera, asesorada por Bush-Aznar-FAES. Soy un ectoplasma que asusta, una sicofonía obsesiva que aplasta. Equivocados vosotros. Porque sólo soy víctima. Queréis equipararme con el verdugo. Cobo tiene miedo por él, por sus hijos. Como si yo fuera una vulgar espía, rastreadora de incestos electorales entre alcaldes y vice-alcaldes. Sólo estoy ensayando mi gesto definitivo: Juro por mi conciencia y honor desempeñar mi cargo de presidenta de España. Les presento a los ministros González, Granados, Beteta. Y Güemes, mi halagador vitalicio. Morena de Obama visitado, pretendida por Sarkozy, encarcelando homosexuales, quemando educación para la ciudadanía, paseante al atardecer con Rouco sacrosanto.

Espérame a las once. Pasará mi chofer con la caja de puros. Disfrútalos con Rita, Celia y Teófila. Te nombraré Registrador de la Propiedad a perpetuidad. Podrás encararte con el notario que equivocó unas escrituras, con el bedel que trae el café frío, con la limpiadora que olvidó la papelera.

Espérame a las once. A lo mejor me retraso. Hay que cambiar los tresillos de la Moncloa, y las cortinas y las sábanas de seda. No quiero sentirme incómoda como Ana-concejal-medio-ambiente.

No me esperes a las once. Me siento ungida de inocencia infantil, de nenuco perfumada, presidenta-presente-futuro-para-siempre, embalsamada de pureza-Velázquez-cielo-azul.



sábado, 31 de octubre de 2009

EL DESCANSO DEL HOMBRE

Madre, para descansar morir"

(A. Machado)



Llevo seis meses muerto. Desde febrero exactamente. Fue un entierro breve: mi mujer, mi hijo, tres amigos y siete conocidos. "YA DESCANSO". Una frase diez veces repetida. Como si mi vida hubiera sido un tremendo cansancio. Cuando se fueron todos, sentí la soledad boca arriba, con la tierra encima, con las flores encima, y la escarcha, y el viento y la ausencia. Incómoda postura de muerto. Helado ademán de muerto. Falta de costumbre, tal vez, de ser muerto.


En los cementerios todo es paralelo: los cipreses, los nichos, las tumbas. Como campos de olivos andaluces. Muertos seminales, abonos válidos, pero sobre todo paralelos. Soledades cercanas, casi inmediatas, que nunca se encontrarán en la intersección de una esquina. Una historia junto a otra, cada una con sus besos, su felicidad, su tristeza, su plenitud y sus sinsentido. Pero cada muerto con su muerte, sin un intercambio dialogal.

Escuché lágrimas cercanas. Golpes secos de tierra. Flores derramadas. Y los amigos susurrando: "YA DESCANSO". Como si también esa otra vida hubiera sido un tremendo cansancio. En esta inmensa cama, desconozco a quien está a mi lado, DESCANSANDO, desde hace unas horas. Así fue la vida: nos cruzamos con otros, estuvimos con otros, caminamos junto a otros, ignorándolos casi siempre a todos.

A ella nadie le habló de mi muerte. No estuvo en la breve despedida. No verá esquelas publicitarias de mi marcha. Pero estoy seguro: algún día encenderá una flor con su mirada y se besará los labios con el último viento de mis besos. Aquí soy la conciencia de un recuerdo. Pero fui la conciencia buscada por su cuerpo, por su boca de luz y por su risa.

Un muerto es un cruce de caminos, una confluencia de luces y de sombras. Un muerto es una plaza abierta y ancha con niños juguetones, viejos dormidos, muchachas asomadas a los pechos y machos encelados. Pero

un muerto es, sobre todo, un silencio vertebral, un pacto del amor con la nada, un bloque de alegría grabado de tristeza.

Aquí estoy a los seis meses de muerto. Cargado de lunas, de tierra y de lágrimas viudas. CANSADO, TERRIBLEMENTE CANSADO de soportar vuestras vidas sin mí, CANSADO de ser recuerdo y fecha de un calendario. Olvidadme el mes próximo. Quiero enamorarme de la tierra que me ha tocado en herencia, del vientre ancestral y diminuto que me alberga, del útero caliente de madre primitiva. A lo mejor un día, en las afueras del alma, os crece una nostalgia, una duda, una pregunta. Entonces, a lo mejor entonces, sabréis que el mar es un muerto que os dijo adiós en febrero.




miércoles, 28 de octubre de 2009

ROUCO, EL POLITICO

La Jerarquía eclesiástica nunca ha renunciado al dominio de las conciencias. Los valores de la razón, laicicidad, secularización, autonomía del ser humano frente a la suprema decisión vital de su existencia, no entran dentro de la escala respetada por los Obispos. Muy por el contrario, son ellos, y solamente ellos, los que tienen la misión encomendada por Cristo de guiar a sus fieles en sus decisiones morales y de trazar el camino, siempre unívoco, de la bondad moral. Depositarios del monopolio de la verdad, son ellos quienes deciden desde no se sabe qué ciencia infusa lo que cada cual debe hacer en cada momento y en cualquier campo de la actividad humana.


Por otra parte, su adhesión inquebrantable a ciertos regímenes siempre dictatoriales, ha hecho acreedores a estos domadores de la verdad de la convicción de que debe darse una duplicidad de actuaciones paralelas entre lo mundano y lo religioso: se reclama así la existencia de universidades católicas frente a las estatales, colegios religiosos frente a los públicos y un derecho único a formar conciencias que debe proyectarse sobre cualquier formación humana venga de donde venga. El estado natural del hombre no es la búsqueda, sino más bien la aceptación de lo que otros piensen por él. La exploración de la verdad no tiene sentido si ella viene ya impuesta por visionarios ungidos y destinados a impartirla como un regalo.

Esta actitud se deriva de una concepción piramidal de la vida en cuyo vértice se sitúa al Papa, infalibilidad absoluta incluida, se ensancha a través del episcopado y descansa sobre una cuerpo de hombres y mujeres sometidos y destinados a soportar el peso de todo el que está por encima de ellos. El giro exigido por el Vaticano II abandonando la concepción de la Iglesia como sociedad perfecta para convertirla en pueblo de Dios nunca fue asimilado por el episcopado. Lo humano como valor en sí mismo no fue asumido por el cuerpo jerarquizado que temía se le fuera de las manos el poder de sumisión impuesta, del que ha venido gozando durante la historia.

La Jerarquía eclesiástica estaba en las espaldas de esos movimientos políticos que fueron la democracia cristiana, la acción católica y todas las organizaciones en las que se “utilizaba” la careta de autonomía para esconder decisiones con pectorales al fondo.

Aparecen ahora Alfredo Dagnino, Benigno Blanco, José Manuel Vidal, y muchos otros queriendo formar un partido político de inspiración cristiana respaldados y bendecidos por el Cardenal Rouco Varela. La Conferencia Episcopal Española nunca ha aceptado la no confesionalidad de la Constitución española. No ha dado por enterrado el tiempo del franquismo en el que de forma adúltera ejerció un dominio absoluto sobre la legislación, las costumbres y la orientación vital de este país. Añora tiempos de dictadura cristiana (qué contradicción), de cruzada vencedora de comunismos, de hordas judeomasónicas y reclama regímenes que impongan la cruz en las escuelas, la espada en las conciencias y la presencia del sagrado Corazón en los montes de cada pueblo. La dictadura episcopal ejercida entonces quiere prolongarse a sí misma aún en ausencia de los golpistas que la auparon a la cúspide. El proyecto de la nueva normativa del aborto, la educación para la ciudadanía, hasta ciertas fiestas no típicas de nuestro sentido mediterráneo son tachadas ridículamente de anticristianas. Su desprecio por la iniciativa humana, por el papel de la mujer, la falta de respeto a la investigación, su oposición a los avances tecnológicos son siempre rechazados en nombre de una dios domesticado, jibarizado, empobrecido, siempre juzgador, nunca compañero de la aventura existencial.

Rouco y los Obispos quieren tener un brazo político fuerte. No les basta con los brazos extenuados del crucificado.

viernes, 23 de octubre de 2009

CAMPS ENCONTRO EL PUNTO G

El muy honorable Presidente del País valenciano no sigue de cerca el desarrollo de la trama gürtel. No le interesa. Sin embargo, preconiza que el partido socialista saldrá expulsado de la Moncloa por dos letras “g” : gal y gürtel.


En España fuimos muchos los que luchamos por el advenimiento de una democracia. Algunos cayeron en el intento. Otros pasaron años entre barrotes. No cejaba la bota militar en su afán de ahogar la palabra. Y la palabra entre rejas es sólo la aspiración fallida de la libertad. Vivimos así cuarenta años. Pero nadie nos pudo ahogar el sueño de ver algún día el horizonte abierto, para siempre abierto.

Da pena constatar que muchos ciudadanos atribuyen la corrupción a esa democracia conquistada. Es cierto que en la democracia aparecen zonas oscuras. Pero es más cierto aún que las dictaduras son oscuridad en sí mismas. Estas nacen de golpes ilegales y terminan podridas en tumbas aunque estén abrigadas por cruces de Avalos.

De aquella boda vienen estos hijos. Aznar, reciente y brillante profesor de ética en la universidad de Murcia, llevado a hombros por Felipe II, celebró nupcias imperiales entre el clan de Valladolid y la Moncloa. Allí estuvieron desde Berlusconi hasta Correa y el Bigotes. Fotos para la historia y para la vergüenza. Por más que le pese a Miguel Angel Rodríguez, los testigos de semejante acontecimiento están ahí. Y es muy significativa su presencia. La trama gürtel se vistió de elegancia y su firma está archivada en los anales escurialenses. Aznar no puede quejarse, como ha hecho en Italia, del trato que le dispensó Telecinco en el programa La Noria. Fue él mismo el que le enseñó a toda España el album corrompido de la boda de su hija.

Gürtel hizo amistades entre los naranjales valencianos. No le bastó Castilla-León, Madrid, tal vez Galicia. Madrid se relaja con la espuma mediterránea casi todos los fines de semana. También el esperpento puso allí su tienda de campaña. Sembró su estancia de coches, relojes, trajes y se trajo un puñado de euros. Los del fin de semana gastan dinero. Los mafiosos lo invierten y recogen sus ganancias para reinvertirlas en Bárcenas y Merinos.

Camps ha encontrado el punto G. No estaba donde los demás pensábamos. Vive en la Moncloa y Zapatero y su partido van a ser víctimas de una noche de juerga que les llevará al exilio del poder. Alberto López Viejo, Benjamín Martín y Alfonso Bosch no han entrado posiblemente nunca en la casa presidencial. Benedicto XVI pagó su tributo de sonorización a un grupo digno de Sicilia. Bárcenas tiene despacho en Génova. Y el honradísimo Costa, que siguió órdenes de la dirección central y que destaca pos su honorabilidad y rectitud ha sido destituido y enviado a las alturas de las Corts valencianas. A Camps le ha traicionado el G-ps de su orgullo y su cinismo.

En democracia hay oscuridades, zonas turbias por eclipses siempre parciales. Los que entonces luchamos, los que dejaron sus vidas por cunetas olvidadas, los que arrastran barrotes en el alma, bendicen cada mañana la libertad florecida en las ventanas.




martes, 20 de octubre de 2009

ESTABAN ALLI

Estaban allí. Amantes de la vida. Doscientos cincuenta mil. Un millón. Dos millones. No importa. No eran cifras. Eran los amantes de la vida. Venidos de la España grande y libre. Juan Cotino de la Valencia gürteliana. Mayor Oreja, campeador fetal. Atacando la homosexualidad en Europa. Añorando la ley de vagos y maleantes. Construyendo guantánamos gays. Amputando derechos de cariño, rompedor de arras matrimoniales, de amores entusiastas. Aznar presente. Por un deber moral, dijo. Deber que no cumplió cuando era presidente. María Dolores hermoseando el camino de Sol a Puerta de Alcalá. María Dolores infiltrada de Ricardo Costa para aguantar el gesto, de Camps-sonrisa-ensayada.


Estaban allí. Amantes de la vida. Se les notaba cuando exigían la dimisión de Zapatero traidor. Cuando se pedía la vuelta de Aznar “porque tiene más cojones que Mariano” La testosterona cuenta en las urnas y alumbra fetos bélicos, destructores, desangrando medias lunas.

Los Obispos escondidos. Representados por vicarios del Partido Popular, Acción Juvenil Española, Alternativa Española, Falange Auténtica y de las JONS, exigiendo un estado confesional, como cuando Franco, misa obligatoria de siete para campesinos y criadas, de doce para chaquetas blancas de secretarios del movimiento y esposas de velo negro de encaje. Rouco escondido con Rajoy, pero dando la cara en las banderas de águilas imperiales. Benigno. Isabel, Cristina, soportando la responsabilidad de defendernos contra los que quieren implantar el nuevo holocausto, contra Bibiana Aido gaseando familias y un niño de tres años que afirmaba que Zapatero quería matarlo.

Se celebraba, qué coincidencia, el día mundial contra la pobreza. También estuvieron en la calle unos cuantos amantes de la utopía. Exigían pan para mil millones de hambrientos. Con un poco de aceite sobrante de las almazaras de la Unión europea, de las ayudas a los grandes bancos, de los díaz ferrán multinacionales, del primer mundo-estado de bienestar, mundo de obesos vestidos de diseño. Pidiendo un poco de caldo caliente para estómagos desacostumbrados. Por si sobra de la compra de material bélico, de bombas de racimo. Por si quedan migajas de vida de tanto uranio enriquecido o empobrecido, destinado a diagramar muertes de hombres, de mujeres, de niños. Por si algún mandatario renuncia a la posesión de armas atómicas, nucleares y se pone en la cola del pan e invierte en paz y abundancia, en agua, en vacunas, en universidades. Estuvieron los que creen en la utopía y saben que a lo mejor un día los poderosos deciden echarle al mundo el brazo por el hombre y darle el cariño que el pobre necesita para convertirse en hombre, en mujer, en niño sonriente, en humano.

También estuvieron en la calle. Pocos, muy pocos. Acunando la utopía. No estaba Aznar, ni Mayor Oreja, ni Cospedal. Ausentes los Obispos, las isabeles, las cristinas, los benignos, cuidadores de reservas familiares. Los amantes de vidas iniciales despreocupados de mil millones de vidas desangradas por el hambre, la falta de agua, analfabetismo hasta los ojos, carentes de vacunas, muertas de asco. Millones de humanos convertidos en pasto de moscas, de plagas. Millones de seres que nunca aprenderán el gozo de la sonrisa porque sólo tendrán capacidad de mueca.

Unos tuvieron el lujo de Sol, Alcalá y esa Puerta mayestática cerrando el paso a la bella utopía de los que sólo pueden limosnear un pedazo de pan chorreado del aceite que le sobra al despilfarro.

domingo, 11 de octubre de 2009

PERSEGUIDOS

Rubalcaba no era el ojo que todo lo veía. Ni el Fiscal acosaba. Ni la Policía exigía postura manos arriba. Ni Garzón era el Torquemada inquisitorial. Bárcenas, Costa, Camps, López Viejo existían. Eran carne de Correa. Sangre de Bigotes. Despacho contiguo. Amistad de Esperanza. Rajoy inexistente, holograma de sí mismo. Defensor de inocencias, agustina frente al mundo. Cabeza de martirologio incomprendido. Bárcenas-Costa-Camps-víctimas de las instituciones que soportan el estado de derecho.


Después de meses de sufrir persecución, de sentirse arrinconados por las calumnias de todos los estamentos, de culpar a otros de los males sufridos, Pons reconoce que “lo que estamos viendo es algo muy bochornoso que salpica a dirigentes populares, que hay que depurarse y eliminar aquellas partes que pueden estar intoxicadas”

Rubalcaba no era el ojo que todo lo veía. Cospedal sin pruebas de tanta denuncia calumniosa. Sigue inculpando al Fiscal General del estado, al Ministro del Interior y a Teresa Fernández de la Vega de un espionaje sólo real, probado y ahogado en la Comunidad de Madrid.

Se habla de los implicados como seres extraños al Partido Popular. Se aprovecharon de éste, pero como ajenos, como adheridos parásitos que siempre fueron advenedizos. Nunca carne de gaviota. Nunca sangre de génova. Tesorero, Secretario General del partido en Valencia, Presidente de una Comunidad, Senadores de Madrid o de España. “Diez o quince señores desconocidos que han montado una trama de insensatos", dice Miguel Angel Rodríguez. “Gentecilla a los que no se les conoce una frase, una idea... Nunca han puesto la cara por el Partido Popular". "¿Quién era Ricardo Costa hace seis meses?", se pregunta el antiguo portavoz de Aznar-suegro-de-Agag-amigo-de-Briatore-Berlusconi. "Esta gentecilla es gentuza que se han financiado ellos mismos con una red creada desde Las Antilllas", sentencia MAR. A eso quedan reducidos los amigos de Rajoy, sus validos. D. Mariano debería defenderlos también de la humillación infringida por este comentarista de palabra anoréxica, que sigue viendo hordas judeomasónicas como si de un generalísimo de mercadillo se tratara. Los perseguidores no son sólo las instituciones del Estado. Rita, Esperanza, Pons se han erigido ahora en defensores del honor popular. Exigen responsabilidades, envueltos en albornoces verdes y bolsos de marcas registradas. También ellos se revuelven contra amigos del alma hasta hace un ratito, sólo un ratito. Si alguien tiene que caer que sea el otro. Para eso tiene reloj y coche y viste elegancia calle Serrano.

Ricardo queda destituido temporalmente. Sin merma de su integridad, de su buen hacer, sin infravalorar su gran aportación como secretario general. Sin merma de la confianza depositada en su persona ¿Por qué entonces le expulsan? A lo mejor porque se quedan los traidores, porque Rajoy no tiene coraje suficiente (o como se llame eso), porque los berlusconis tienen inmunidad y soportan la vergüenza de ser quienes son.

Ahora hay una oposición importante y seria: han echado a la gentecilla-gentuza. Quedan los que quedan. Mariano al frente enfrente a Rubalcaba, el ojo que todo lo veía.




martes, 6 de octubre de 2009

Si tuviera tus manos, si tuviera

tu boca estremecida y entregada.
Si tuviera tu sombra iluminada,
si tuviera tu cuerpo, si tuviera…

Recorro la esperanza hasta la espera,
la ausencia indeseable y deseada.
No estoy y estoy en cada encrucijada,
olvidado en la esquina de tu acera.

Desde tu vientre voy hasta tu vientre.
Peregrino del muslo a la cadera
hacia la rosa azul de la alegría.

Allí quiero hospedarme hasta que encuentre
la constancia de alguna primavera
o la espalda de la melancolía.

sábado, 3 de octubre de 2009

Soy simplemente un hombre.

un puñado de tierra con tres partes de agua.
Un cerebro asombrado,
unas ingles que buscan otras ingles
para apretar la vida
y fundar otro puñado de tierra con tres partes de agua.
Un hombre simplemente.
Sin mayor aspiración que olvidarse a sí mismo
y morirse de pena con el asco en los ojos.
Deja el hombre un recuerdo estremecido
en el barro de otro,
en las ingles del otro,
en el asombro cerebral de quien lo quiso?.
Finaliza el hombre con el hombre,
como una calle cortada, sin salida,
coincidiendo con la nada,
empotrado con la nada sin un mar adyacente?.
Soy simplemente un hombre, una pregunta.
Barro, cerebro, ingles.
Pero olvido de mí mismo,
olvido ante todo,
olvidado ante todo.

viernes, 2 de octubre de 2009

OBELISCOS INFAMES

Allá cada cual con su dignidad, con su escala de valores, con el entorno alrededor de sí mismo. Hasta llegar a la intimidad, donde el ser humano es una pregunta y una respuesta siempre provisional sobre el propio misterio.


Algunos tienen prisa por exponerse, por colocarse fuera de su profundidad y queda entonces a la pública subasta la indignidad como fundamento de sus vidas.

Jesús Neira fue nombrado por Esperanza Aguirre Presidente del Consejo Asesor del Observatorio Regional de violencia de género. Todos estuvimos de acuerdo en condecorar a este hombre y pusimos su nombre a la calle valentía. Colocamos medallas en el callejero madrileño y albergamos su larga agonía hospitalaria como propia. Ana Botella afirma que él “representa los valores que hay que exaltar en una sociedad como la nuestra”, aunque esté presidida por “un jovencito que sólo dice imbecilidades” como afirma el profesor, aunque haya que despreciar un parlamentarismo democrático, como también asegura, o desprecie al Presidente de los EE.UU por “no ser un líder de primera sino un pelele” Valores cívicos donde los haya que deben ser inculcados al mundo universitario donde se mueve el Profesor Neira. Allá cada cual con su dignidad, pero que conste que el Presidente del Consejo contra la violencia de género se mofa de la gordura de unas niñas fotografiadas junto a un mandatario negro elegido por los norteamericanos y el jovencito de las imbecilidades elegido por el pueblo español. Apóyese, Profesor, en los brazos de Ana y Esperanza. Ellas son portadoras de valores eternos.

Goztone Mora, secretaria de inmigración de la Genelalitat valenciana, no entiende la alianza de civilizaciones, ella, cuya preocupación consiste en dar acogida cálida a tantos y tantos estómagos vacíos que cambian la vida por un avecrém caliente. Refiriéndose a la fotografía tan interesadamente comentada, Goztone asegura con una sintaxis ininteligible: “A mí me dejó consternada la cara de una de las hijas. Creo que es la pequeña, se parece a su padre. Es una cara que a mí me ha tocao, me ha tocao (sic) en el sentido de negativo, pero de tener dentro de una rabia contenida impresionante. De verdad, una cría tan pequeña. ¡Que pena, que pena, eh, que ya viva allí! He entendido, ahora sí que he entendido, viendo la imagen familiar, la alianza de las civilizaciones. Ahora he entendido todo. Es que la foto habla por sí sola”.

Gracias a una niña y al apoyo de César Vidal, esta secretaria de audi oficial, ha entendido el misterio de la inmigración que el Partido Popular iluminó con el propuesto contrato de Rajoy sobre la españolidad de los que vienen.

Allá cada uno con su dignidad. Hasta la Giralda está manchada del vómito caliente de Antonio Burgos. Hace años, muchos años, me invitaron al primer acto oficial de Carrero Blanco como Presidente de Gobierno fuera de Madrid. Me negué y el ABC me llamó “perro ladrador”. Ya por entonces, hace años, muchos años, Antonio Burgos llenaba de podredumbre las páginas de ese periódico. No cabe apelar a la libertad de expresión confundiéndola con la incapacidad de decencia. Este depredador de inocencias no ha tenido más alimento que las alimañas que le ponen en bandeja ciertos medios de comunicación. Sobre su infinita capacidad de impudicia descansan las consideraciones que hace de la fotografía de unas niñas, hijas de Presidente del Gobierno. Me niego a reproducir ninguna de sus frases, viralmente infectas, para no manchar la luminosidad de la pantalla.

Los obeliscos tienen todo un significado en la visión freudiana. Hay cabezas que sólo sirven para coronar esos obeliscos.


viernes, 25 de septiembre de 2009

BUSH ERA BLANCO

“El negro nos dirá a los españoles que Zapatero es nuestro redentor” Este discriminatorio concepto de la negritud, referido al Presidente de los EE.UU, ha salido de la mente de un colaborador de L’ Osservatore Romano, periódico oficial del Papa y de la Curia católica: Juan Manuel de Prada. Nada ha dicho la Conferencia episcopal ni su portavoz Martínez Camino. Los Obispos no pueden ocuparse de condenar semejante discriminación tal vez porque están de acuerdo con ella o porque ya se han ocupado de reprobar la actitud del Negro Obama que autoriza el estudio y la aplicación de las células madre y se muestra abiertamente defensor de los matrimonios homosexuales. Por el contrario, han mostrado rápidamente su indignación contra el Parlamento español por la posibilidad, por otra parte frustrada, de censurar al Papa volcado en culpar al condón de la difusión del sida. El Papa coincide con el colaborador de su periódico, el ilustre Prada: “Los repartidores de condones son los creadores del sida”

El hombre es una alegría para sí mismo en la medida que su evolución le permite acoger al otro como una alegría en la existencia. No hay hombre y mujer, blanco ni negro, superior ni inferior. Somos el gozo de nosotros mismos en un cosmos jubiloso y fuente de misterio. Quien necesita las distinciones, las diferencias, quien exige estar por encima del otro, simplemente dura, no existe como humano.

Buhs era blanco, como Juan Manuel de Prada. Despreció las soberanas decisiones de un gobierno, el español, elegido democráticamente. Invadió ilegalmente un país, Irak, ocasionando miles de muertos. El Presidente Aznar, jaleado por sus seguidores en el Parlamento, firmó con los pies encima de la mesa oval nuestro compromiso con la destrucción irakí. Buhs era blanco. Contribuyó decisivamente al aumento del hambre en el mundo porque el dinero debía ir destinado a las bombas de racimo. Arrimó el hombro en el hundimiento palestino intermediado por Israel. Buhs era blanco. Contribuyó decisivamente al descalabro de la economía mundial con su visión liberal del mercado. Estamos en la crisis que estamos en gran parte por su complicidad con los abusos del gran capital. Luchó contra la insoportable dictadura de Sadam levantando un imperio de petróleo sobre la sangre del pueblo. Prometió grandes beneficios a sus turiferarios, incluso sacarlos del rincón de la historia. Entregó a las empresas de su vicepresidente la tarea de reconstrucción de un país previa y calculadamente destruido. Implantó la tortura como método de interrogatorio despreciando las directrices de Ginebra. Creó guantánamos para vergüenza de la humanidad, despojando a sus secuestrados de los más elementales derechos humanos. Se coronó emperador y desfiló por la historia ante un Blair y un Aznar arrodillados a su paso triunfal.

Jefe de estado Benedicto XVI. De blanco entero. Jefe de estado Buhs. De oscuro entero. Se encontraron gloriosamente y coincidieron en la condena del aborto, de la homosexualidad, de la investigación científica. Tal vez porque Buhs era blanco.

Jefe de estado Benedicto. Condenando a Obama por apoyar decididamente la aventura investigadora, porque puede ayudar a mitigar el dolor humano, el hambre de continentes enteros, porque pide la colaboración de todos para la paz de todos, porque la mujer tiene derechos, porque los homosexuales exigen la plenitud del amor.

Buhs era blanco. Obama es negro. Tal vez la luz ya ha elegido la soberanía de los amaneceres.



miércoles, 16 de septiembre de 2009

ESTADO DE TERROR

Todo golpe de estado es un atentado contra la palabra. El primer disparo del dictador se efectúa contra el cráneo de la palabra. Las consecuencias vienen solas: anulación de derechos, supresión de libertades, ideologización sectaria, imposición de pensamiento único. Sabemos mucho de esto. Hemos vivido años manchados de sangre de palabra.

Democracia es resurrección. La palabra se hace pan bueno, plaza grande, camino abierto, horizonte frutal. Habita entre nosotros y nosotros vivimos dentro de ella, creciendo humanamente en cálida fraternidad.

Democracia es vértice, altura, cúspide. Hay quien no soporta el vértigo y se despeña confundiendo libertad con apostasía. Y están los que prostituyen la palabra, los que la vacían de tuétano coaxial, de creación poética. Y surge entonces el grito, como explosión destructora, aniquilante, nadificante. El mundo nace de la palabra. Del grito sólo surge la inexistencia.


“El PSOE intenta instalar un régimen de terror en España” Lo ha dicho Camps en un acto del Partido Popular. A su lado, delante o detrás, estaba Rajoy. Escuchó a su defendido de siempre y para siempre, a su modelo de gobernante, al hombre más honrado de este país. D. Mariano calló porque siempre calla, o porque a lo mejor no existe y era sólo un holograma, o porque al margen de la vuelta ciclista nada comenta. Tal vez porque también frecuenta prostíbulos de palabra desnuda, placentera siempre, fecunda nunca. Palabra pagada para que destroce, para que arruine, para hacerla simplemente grito.

“El PSOE intenta instalar un régimen de terror en España” Lo dijo Camps. Camisa blanca remangada. Sin traje-pagado-dinero-farmacéutico. Sin corbata-nudo-calle-Serrano. Le consta al Presidente valenciano escondido detrás de Rita. Ella lo lleva del brazo y lo muestra como mártir de ese estado impuesto por el Partido Socialista. Zapatero-terror. Jueces-terror. Instituciones-terror. Policía-judicial-terror. Relajado a la sombra de Rajoy silente. Mariano-Camps-Rita-Cospedal-Esperanza-Pons-Mato. Guerrilleros contra el miedo impuesto. Testigos del fin de la democracia que tanto les costó traer a este mundo. Notarios del tiro en la nuca a la palabra. Escuchados por los móviles de Zaplana-Telefónica. Con Rubalcaba-gran-hermano al fondo.

“El PSOE intenta instalar un régimen de terror en España” Donde ni siquiera Mayor Oreja disfruta de la quietud que proporcionaba Franco. Es peor este miedo que estremece. Si estuviera Aznar-campeador para liberar el mercado, para hacerlo autónomo. Pero no está aquí. Anda por el mundo denunciando la balcanización de España. La España rota de Isabel San Sebastián. Tal vez lo escuche Cañizares monseñor. Cardenal regante de cruces que unifiquen el viejo toro muerto en plazas de albero negro. Camps de luces, desafiante. Rajoy banderillero de abortos abortados. Cospedal de miel recién casada. Trillo y Soraya. Pedro J-amigo-enemigo de quien toque en suerte. Curri de Esperanza llena.

Empuja Zapatero. Embiste el terror. Acecha el puntillero. Mariano da la vuelta con la alegría en el pecho. Los toros están dormidos, desangrados por cementerios azules.

lunes, 14 de septiembre de 2009

BERLUSCONI-USIA

Escribir es un bello oficio. Pero incluye la necesidad de hundirse a veces en humedales putrefactos. Cuando de Berlusconi se trata por ejemplo. En su reciente visita a Italia, el Presidente Zapatero tuvo que soportar las indecencias verbales de su Primer Ministro. Acostumbrado a prostituir a mujeres, a mercadear con la intimidad del placer confundiéndolo con amor, se definió como el presidente del Ejecutivo de "un país de casanovas y playboys” Explicó que en sus comentarios sobre el gabinete “rosa” español tan sólo quiso decir que Zapatero debería rendir cuentas a seis mujeres y no sólo a su esposa, como había hecho hasta el momento. "Las mujeres son el regalo más bello que Dios hizo a los hombres", continuó argumentando. “Nunca he pagado por prestaciones sexuales. Amo conquistar. Si pagas, me pregunto qué gusto puede haber”

Los medios políticos españoles y de información se han hecho eco de la inmunda actitud de Berlusconi delante del Presidente español y de varias ministras de su gabinete. El silencio diplomático de Zapatero llevó a un periodista a preguntarle si esa actitud implicaba un acuerdo tácito con lo expresado por el Berlusconi-macho. Y entre los partidos políticos han destacado las críticas del PP. Es curioso que una formación política que siempre se ha opuesto a la ampliación de derechos y que ha cargado inmisericorde contra la Ministras por el hecho de ser mujeres se convierta ahora en vengador femenino.

Es correcto que nos apiñemos junto a nuestras ministras ofendidas por un descerebrado. Pero no he oído una reacción similar frente a otros descerebrados nacionales. Alfonso Usía, por ejemplo, ha dicho alto y claro que “me gustaría darle un cachete en el pompis a Leire Pajín y a Bibiana Aido” Las ministras-floreros son conceptos habituales en Alfonso. Admite que Trinidad Jiménez y Bibiana Aído están muy bien para tomar una copa.

José Manuel de Prada habla de “la imbecilidad del pensamiento de la Ministra de Igualdad” y le atribuye un pensamiento reptante. “El pensamiento de Bibiana no se ha puesto todavía en pie, es un pensamiento abyecto (de iactus, participio pasado de iacere) que repta, que se arrastra por el suelo, ignorante de su condición humana”, asegura.

Estos dos “ilustres” escritores nos tienen acostumbrados a consideraciones tanto o más nauseabundas que las de Berlusconi. Nuestro orgullo nacional nos lleva a enfrentarnos con quien nos ataca desde fuera, pero parece que comulgamos beatíficamente cuando el vómito nos lo arroja en la pechera alguien de nuestro entorno.

Lo dije en otro artículo y lo repito ahora. Creo que constituyen la grasa sobrante de una falsa intelectualidad. Se impone una liposucción que elimine a quienes impiden estilizar la belleza de la vida.

viernes, 11 de septiembre de 2009

AZNAR, ECONOMISTA Y APOSTOL

En el Foro Económico del Instituto de Estudios del Este (Polonia), Aznar ha demostrado no sólo que habla sin complejos, sino que ha perdido la decencia que otorga la humildad en cuanto reconocimiento de las propias limitaciones. “Europa no saldrá de la crisis con más proteccionismo, sino con más reformas, apertura, y con más libertad” Aznar ignora lo que significa el término libertad en su profundidad. Por eso sólo puede referirse a la libertad absoluta de mercado. El discípulo amado de Fraga, que reposó su cabeza sobre el regazo del ex ministro franquista, confunde el valor de las palabras e identifica libertad con liberalismo económico. Y como ignora la hondura de ese quehacer humano que es la empresa siempre provisional de ser hombre, sólo puede referirse al zarpazo selvático de la transacción mercantil. Y ahí sí. El gran economista, el presidente-milagro-del-crecimiento-español, reclama la no intervención de ningún poder que modere la ambición de unos pocos a costa de todos los demás. Los ricos lo son a costa de los pobres y Aznar defiende esta esclavitud como una bendición mercantil. Los “pilares” sobre los que se debe diseñar Europa son “una defensa de la libertad y la historia del Viejo Continente” Aznar habita un mundo pequeñito. Le basta y le sobra para su capacidad mental. Contentarse con el “viejo continente” es negar la globalización como amplitud de visión, como comprensión universal. Responde a una mentalidad pueblerina, paleta y estrecha. Reducirse a ese viejo continente es despreciar la aportación de nuevos mundos, de ricas culturas, de anchuras enriquecedoras.

“El sueño de Europa es la libertad”, afirma Aznar, hundiéndose en su confusión interior. Nadie puede decirle al ex presidente las copas de vino que debe tomar antes de ponerse al volante, ni a la velocidad a la que debe conducir. Espero que esta no sea la libertad a la que aspira Europa. Pero Aznar-botellón-fórmula 1 no da para más.

D. José María no es sólo un economista ajeno a las raíces más profundas de la crisis actual hundidas en esa falta de control, en ese neoliberalismo salvaje, en esa ambición carnívora, sino que además se proclama una y otra vez defensor de los fundamentos cristianos de Europa. “Necesitamos conservar nuestra historia porque mantener nuestra historia es conservar las raíces del cristianismo”.

Compaginar esa antropofagia económica con una vivencia cristiana resulta imposible. Hacer coincidir Vaticano-Jerarquía-capitalismo es fácil. Cristiandad y dinero van de la mano. Confundir Vaticano con cristianismo es una tentación eclesiástica (no eclesial) permanente. Unificar cristiandad con cristianismo, también. Pero esa mezcla en una mente lúcida como la de Aznar debería ser incompatible. Aznar está acostumbrado a manosear las palabras como manosea el precio de sus conferencias.

Rouco: “Si las familias de Madrid y Pozuelo rezasen todos los días el Rosario de la Virgen no habría ocurrido lo que pasó el fin de semana” “Los remedios sencillos piden almas y corazones sencillos que, de algún modo, saben ser esclavos del amor de la Virgen y del amor de Cristo”, pontificó.
Rouco Varela se encarnó en Aznar y habitó entre nosotros.

miércoles, 9 de septiembre de 2009

HAMBRE DE MUJER

Karzai parece haber ganado las elecciones afganas. Carme Chacón ha hablado de las primeras elecciones democráticas. La ONU pone en duda su transparencia. Habría que advertir que unas elecciones fraudulentas son necesariamente antidemocráticas. Pero no cabe duda de que el mandatario goza del beneplácito de EE.UU y de la Unión europea. Es el hijo amado en quien reposan todas las complacencias.

Occidente está acostumbrado a condenar las dictaduras y a ser intransigente con los mandatarios absolutistas que subyugan a sus pueblos. Pero cuando de sacar ventajas económicas se trata, ningún país democrático hace ascos el dictador más repugnante. China es un cliente apetecible para cualquier economía. Incluso Esperanza Aguirre que ve en el puño levantado “un gesto amenazante de quienes han ejercido una ideología totalitaria y han pisoteado los derechos de millones de ciudadanos en la Europa del Este”, que se declara visceral anticomunista, trata de introducirse en el mercado de la mirada oblicua. Los intereses económicos superan dolorosamente a los ideales de libertad y democracia. Hasta la propia Vicepresidenta, María Teresa Fernández de la Vega, puso de relieve que había que dicotomizar ambos campos y tratarlos con independencia. Uno, que todavía guarda sueños utópicos en los hondones del alma, no puede priorizar la economía frente a la libertad. La libertad se alimenta de víctimas gozosamente ofrecidas. Las dictaduras se nutren de humanidad arrebatada.

Poco antes de estas elecciones democráticas para los intereses de Europa y Estados Unidos, el Presidente Karzai promulgó una ley terrible contra las mujeres. Los maridos insatisfechos sexualmente pueden someter a su esposa al la tortura del hambre. O la mujer es una fábrica de orgasmos o sentirá en su vientre la mordedura del ayuno. El valor de ser mujer-mujer con todo lo que ello entraña queda reducido a su capacidad sexual de producir placer. Se da por descontado que la insatisfacción sexual no responde a deficiencias masculinas. El macho siempre es macho y no cabe dudar del valor de su entrepierna. Pero la mujer puede ser jibarizada, reducida a centímetros. Sus valores, su capacidad de transformación del mundo, su creatividad del mundo, su alumbramiento gozoso de la historia no deben ser tenidos en cuenta. La mujer es una circunscripción vaginal.

El occidente cristiano, reserva de valores eternos, de esencias cristianas, de derechos de igualdad, bendice la elección falsamente democrática de un hombre que pacta con señores de la guerra y que pisotea a la mujer. A talibán huele Karzai, a fundamentalismo, a fanatismo. Es lo que es, en frase atribuida a Kissinger hablando de Pinochet, pero es nuestro hombre.
Se nos llena la boca de democracia, de solidaridad, de defensa de la mujer. Tal vez estemos pronunciando su santo nombre en vano. Somos capaces de simultanear la blasfemia y la proclamación de la grandeza de la libertad. Hay que estar orgullosos de nuestra propia hipocresía.

martes, 18 de agosto de 2009

DE NIÑA A MUJER

Mariano Rajoy nunca tuvo la voz caramelizada de Julio Iglesias. Pero sí tuvo sueños de futuro como los grandes arquitectos de la historia. En la última campaña electoral lo reveló con la sonrisa cuasi mística del visionario: Sueño con una niña que pueda estudiar y asimilar unos valores hondos y profundos. Una niña con oportunidades iguales a las demás. Una niña que encuentre trabajo y desarrolle la creatividad de la que han gozado siempre las niñas en la España grande y libre.

Rajoy perdió las elecciones, pero no abortó la hermosura del sueño. Y aquella niña semilla se hizo mujer. Tal vez Ana, Soraya, María Dolores, Monserrat…Veníamos de Aznar-omnipotente, de Alcaraz-condecorado-de-dolor-despreciado, de Zaplana-sol-domesticado. Por Valencia fue. Niñas-mujer, creadoras de azahares, artesanas de gajos almibarados, espumas de mar sin estrenar. Y nos lo creímos. Tuvimos fe en la niña-mujer, fecundadora de futuro, hacedora de amaneceres sin pecado original. Rajoy perfiló el sueño tirando el lastre de José María-emperador, de Esperanzas-desesperanzadas, de Bush despeñado. Rajoy-centrista-centrado sostenía el sueño grande, la encarnación redentora de alegrías inmediatas.

Pero Trillo-Yak aparte, son ellas las que machacan la dignidad de la palabra. Han parido la inquisición, las escuchas sin oídos, las persecuciones de machos violadores. María Dolores pisoteando la verdad del estado de derecho. Esperanza infiltrada de filtraciones de vecindario. Ana Mato guardando los nombres recibidos en confesiones sacrílegas. Monserrat confundiendo espionaje con INEM. Rita confeccionando anchoas cántabras para vestir a Camps de comunión primera. Isabel San Sebastián soportando la destrucción de España. Isabel Durán defendiendo vuitones regalados. Y Rajoy ratificando tanto sueño plomizo, como si no hubiera existido Valencia, como añorando la vida parasitaria dentro de Aznar, de FAES, de GEES. Olvidadizo de Castellana paseada defendiendo víctimas, pero salivando contra Fiscales, Jueces, Fuerzas de Seguridad, CNI. Prohibido, Sr. Rajoy, escupir en el suelo bajo multa de fracaso absoluto. Porque este suelo nos ha costado mucho conquistarlo, porque la calle ha vuelto a ser de todos, arrebatada a su padre fundador. Porque hemos plantado el aire de macetas para espantar olores de pólvora caliente. Reservado el derecho de admisión en esta plaza grande de libertades triunfantes, abiertas de par en par. No hay lugar para quienes quieren levantarle la falda a la palabra y prostituirla. Durante cuarenta años tuvimos que mantenerla oculta para que no la fusilaran una madrugada cualquiera. La soñamos durante mucho tiempo y se nos hizo mujer. Palabra-mujer-sin-niñez. Porque le prohibieron ser niña. Pero ha madurado regada de sangre y olvido. Y aquí la tenemos. Acostumbrados a su calor, a mamar libertad, autonomía, derechos. Y la defendemos todos, también los votos, los Fiscales, los Jueces, las Fuerzas de Seguridad. La llamamos democracia. Que nadie, ni en pretendida defensa propia, la manche o la viole.

Rajoy ha sido devorado por sus propios sueños. Se despertó a destiempo. Nunca parió aquella niña-mujer.


domingo, 16 de agosto de 2009

SI YO TUVIERA UN TRICORNIO

Si José Luis Rodríguez Zapatero es la persona más dictatorial del mundo, si dedica más esfuerzos en perseguir a los miembros del Partido Popular que a los terroristas de ETA, si exige a los Jueces, Fiscales y Fuerzas de Seguridad que pongan todo su empeño en la destrucción de la Oposición, si ha puesto al servicio de su mandato destructor todos los resortes tecnológicos para escuchar ilegalmente a Trillo, Cospedal y Arenas, yo le aconsejaría al Presidente que tomara lecciones del espionaje ejercido en la Comunidad de Madrid porque no está mal visto por los dirigentes populares.

El gobierno, como dice Montoro, tiene la obligación de demostrar que las acusaciones que se le echan en cara no son ciertas. María Dolores, Ponds, Mato, Mariano están en su derecho de acusar. No es su misión acudir a los tribunales con pruebas de ningún tipo. Nada tienen que probar. Es más bien el Gobierno el que debe demostrar su limpieza y aportar argumentos fehacientes de que el Partido Popular miente. Ricardo Costa ha acusado al Presidente José Luis Rodríguez Zapatero, de ser el "responsable de un complot de Estado" contra el PP. “Más que un complot –ha añadido- es una conspiración utilizando los resortes del poder”. En esto consiste el Estado de derecho: hay que presuponer la culpabilidad y demostrar en consecuencia la inocencia. Así era con Franco y así debe seguir siendo. Por eso con el Generalísimo se vivía en paz (María San Gil), se disfrutaba de placidez (Mayor Oreja) y sus vestigios son huellas de un pasado glorioso.

Miguel Angel Rodríguez, Jiménez Losantos, Pedro J. Ramírez no han cesado de pontificar sobre el origen bastardo del gobierno socialista: se fraguó en Atocha un 11-M votado por el miedo, la sangre, la muerte, el asco y la tragedia. Su Presidente firmó una Unión Temporal de Empresas con ETA por coincidencia de fines y objetivos. Lo advirtió Jaime Mayor. Ya Acebes había adivinado que tenían los mismos fines y que a la larga usarían los mismos métodos. Por eso el desprecio a las víctimas y la traición a los muertos que escupió Rajoy. Y ahora se evidencia tanta profecía cumplida.

Uno perdió media vida luchando contra un dictador que nos libró de conspiraciones judeomasónicas, de comunismo, que purificaba cada madrugada la sangre de la patria en las cunetas infinitas con muertos infinitos. Uno perdió la otra media soñando con utopías hermosas, con la plaza ancha de la palabra, con el realismo de quien pedía lo imposible. Y ahora se encuentra con un contubernio dictatorial, ejecutando al Partido Popular contra las tapias de la justicia. Zapatero añorando tricornios de febrero, disparando al techo del Congreso, exiliando intelectuales, apuntando pistolas contra lorcas de derechas y unamunos ortodoxos, poblando de ataúdes laicos las aceras de la gloria.

Tal vez este otoño la gripe de Trinidad Ministra se me suba a los pulmones podridos de enfisemas. Que alguien le preste un poco de luto a mis cenizas, mientras un Presidente se cala el tricornio acharolado de febreros, nostalgias y recuerdos.

martes, 11 de agosto de 2009

EMPRESARIO-CORAJE

Existen las madres-coraje, los padres-coraje, los vecinos-coraje. Todos han salvado de circunstancias terriblemente adversas a sus hijos o a los del cuarto B. ¿Existen empresarios-coraje? Por lo menos uno, sí: Díaz Ferrán.

La economía española está atravesando una crisis grave. El mundo también. Aquellas hipotecas basura trajeron estos embargos globalizados. Los grandes bancos americanos contagiaron la economía mundial y a duras penas estamos consiguiendo salir de la unidad de cuidados intensivos. Y uno creía que estaban claros los orígenes de esta quiebra económica y que en consecuencia, atacando las causas, podríamos mirar con cierto optimismo el futuro. Se habló de una refundación del capitalismo, de la necesaria supervisión de los gobiernos, de la intervención incluso de las autoridades gubernamentales para evitar nuevos descalabros. La economía mundial no deberá quedar exclusivamente en manos de unos cuantos. Los grandes economistas así lo exigen. Los grandes menos Aznar, Esperanza Aguirre, Díaz Ferrán y su séquito vergonzante.

En realidad –piensa Díaz Ferrán- estén donde estén los orígenes de esta hecatombe deben pagarla los trabajadores. Para que de una vez por todas sepamos prevenir futuras distorsiones del mercado y salgamos del hondón en que actualmente nos encontramos, hay que reformar drásticamente el mundo laboral. Los derechos, adquiridos con sudor y sangre a lo largo de la historia, deben someterse a los intereses crematísticos del empresariado. No se puede consentir que la clase dominante dependa del andamio, del esclavo administrativo de corbata o de la tortilla de las once. Las humildes tarteras no pueden devaluar las mantelerías de hilo o el caviar del Ritz. Pongamos las cosas en su sitio.

Y Díaz Ferrán, empresario-coraje, ha reunido el valor suficiente para pedir el despido libre, rebajas en las cotizaciones a la Seguridad Social, libertad para decidir ERES sin intervención del Organismo de trabajo correspondiente, menores indemnizaciones para los trabajadores despedidos respetando así las decisiones que los empresarios, y sólo ellos, tomen para la buena marcha del país. Ni un gobierno de izquierdas ni unos sindicatos plagados de “liberados” pueden ser interlocutores válidos en este planteamiento ruin y vergonzante. Tal vez Esperanza, la cojonuda o Rajoy el inexistente puedan comprender a la patronal.

Y en el colmo del cinismo, ha exigido una bajada de los salarios. ¿A cuento de qué, piensa el empresario-coraje-salvador, tiene que cobrar un trabajador mil euros por sólo diez o doce horas de trabajo? ¿Por qué hay que darle a un viejo cuatrocientos euros de pensión si una sopa de ajo vale sólo tres? ¿Por qué empeñarse en mantener y promocionar un estado de bienestar para todos si eso sólo debería ser patrimonio de los ricos? ¿Por qué una enseñanza gratuita? ¿Para qué necesita el hijo del albañil estudiar derecho o medicina? ¿Para qué una sanidad pública y universal?

Bajemos los salarios, despidamos a placer, prescindamos de una vejez improductiva, dice el empresario-coraje, y tendrán respuesta adecuada todas las interrogantes anteriores.

Los derechos para quienes pueden comprarlos. Lo pobres tienen suficiente con las obligaciones.

Los empresarios crean riqueza y “dan” de comer a muchas familias. ¿No serán esas familias las que dan de comer a los empresarios? Los grandes restaurantes están sostenidos por marmitas de aluminio y tinto de sol caliente, por padres y madres que dejan dormidos a sus hijos cuando se van al trabajo y los encuentran dormidos cuando vuelven.

Que nadie me tache de demagogo. Es simplemente el escozor vital de muchos ante la desvergüenza repugnante de unos pocos.



sábado, 8 de agosto de 2009

PALABRA Y DEMOCRACIA

La palabra es la raíz de la democracia. Deberíamos ser conscientes de que los tres poderes clásicos que fundamentan el estado de derecho brotan en realidad de la palabra. Por eso los dictadores la destierran cuanto antes de sus proyectos opresores Sólo sobre su cadáver, les resulta fácil erigir la supresión de todos los derechos que asisten a los ciudadanos convirtiéndolos en súbditos.

Los que venimos del silencio espeso, oscuro y tenebroso del franquismo, concebimos la palabra como el vientre caliente que engendró la España nueva, abierta y creadora de nuevos derechos. Amamos la libertad que nos aporta y el futuro que nos alumbra. Profanar la palabra conlleva el desamor hacia la madre que nos engendra cada amanecer. Matarla, es apostatar de nuestra categoría de demócratas. Abusar de ella es violar la intimidad de la libertad,

María Dolores estupra la palabra: “España vive en un Estado policial como el que se vivía antes de la Constitución. Un Estado policial que lleva al Gobierno a utilizar las instituciones, la Fiscalía General, la policía judicial, los servicios del Ministerio del Interior y el Centro Nacional de Inteligencia. La Fiscalía está para perseguir a los delincuentes, los delitos y a los etarras, y no para perseguir o aniquilar a la oposición como pretende el PSOE. Perseguir a la oposición es propio de un sistema antidemocrático. Sin embargo están siendo más perseguidos los miembros del Partido Popular que los asesinos de ETA. Se están produciendo escuchas telefónicas a personas que no tienen nada que ver con algún sumario judicial. Y se hacen de manera ilegal. Esto es lo que practica el Gobierno aunque al PSOE no le guste oírlo; pero es así y así está poniendo en grave riesgo a la democracia”

María Dolores de Cospedal apareció allá por Valencia cuando el congreso. Cuando Rajoy fue encumbrado a la soberanía del mundo. Cuando Aznar lo despreció como a un hijo nacido de una noche loca. Cuando el adiós de Aceves, de Astarloa, de Elorriaga. Cuando Zaplana encontró trabajo ganando un millón de móviles al mes. Cuando Esperanza apostató de Gallardón y Gallardón apostató de sí mismo. Apareció María Dolores con la sonrisa en banderola, miss-centro-centrada, equilibrista entre Fraga-Aznar y futuro, suplente con dorsal de San Gil, becaria luminosa para un ayer gris de Trillos-penitentes-de-Yak-cartageneros, de Isabeles-cuidadoras-de-alcaraces, de banderas victoriosas al paso de víctimas multiusos.

Mientras Rajoy se baña en tila de vacaciones, María Dolores pronuncia lo innombrable. Acusa a todos los poderes del Estado de derecho, los desprecia, los destruye y culpa de ese aniquilamiento a su adversario-realmente-enemigo. Persigue a la palabra, la acosa, la manosea y la viola. Se siente con el derecho de profanarla. Y desguanzándola, experimenta el placer salvaje de contemplar destruida su hermosura. Es la regresión enfermiza –complejo de Electra se llama- hacia la madre fecunda. Con la muerte de la madre se consigue liberarse de muchos complejos interiores.

Alguien debería imponer a María Dolores de Cospedal una orden de alejamiento. Que no se acerque a la palabra, a la democracia, al estado de derecho hasta que haya reinsertado su bandera destructora.

miércoles, 5 de agosto de 2009

TILA

“Muchos se han puesto de los nervios” El detonante de semejante patología ha sido el TSJV al proclamar la inmaculada concepción del Presidente de la Generalitat y sus ángeles circundantes. Desde Zapatero hasta el último votante socialista se soporta esta desazón de piernas inquietas, de insomnio, de escalofrío constante. Que gran parte del país viva en esta situación resulta intolerable. Y si a esta situación unimos la gripe A, puede convertirse en una catástrofe de dimensiones alarmantes sin una Trinidad-Jiménez-MIR-en-urgencias que lo arregle. De ahí la recomendación de Rajoy: hay que ingerir grandes cantidades de tila. Además esto beneficia al comercio, genera empleo y puede ayudar a una economía que corre el peligro de convertirse en “corralito” si el Presidente y los sindicatos no hacen caso a Díaz Ferrán que vende trabajadores de saldo por mercadillos laborales.

El ojo clínico de Mariano Rajoy ha detectado la resurrección de la santa Inquisición. Qué triste que a esta lacra se la llame “santa” Pero que nadie piense en Rouco, Martínez Camino o a Cañizares. Se refiere a Garzón, a la policía judicial que filtra contenidos secretos, a los medios de comunicación que estuvieron a punto de ser silenciados merecidamente por Gómez de Liaño que terminó fuera de la carrera judicial por prevaricador (deberíamos recordar tal vez que la prevaricación existe). Y ante estos hechos Rajoy se pregunta: “¿Qué puedo decir yo ahora?” Le sugiero, señor-presidente-apunto, que nos hable sobre Bárcenas, sobre Merino, sobre el espionaje en la Comunidad de Madrid, sobre Granados-Holmes, sobre el anticatalanismo, sobre el portavoz de justicia Trillo, sobre el Aznar-vigoréxico-flexionado ante Bush perpetuamente, sobre la placidez franquista de Mayor Oreja-conquistador-de-Europa, sobre María Dolores-dolorida porque el Gobierno persigue más al Partido Popular que a los terrorista de ETA. Sobre cuántas cosas puede decir una palabra, D. Mariano!

Se va usted de vacaciones con la esperanza (con minúscula, no se asuste) de que el gobierno no le derribe el chiringuito. Cuídelo mucho no vaya a ser que a su vuelta se lo haya destruido Esperanza (ahora sí con mayúscula). Ganas no le faltan a la “cantaora” Ha ganado un tour con su himno nacional incluido y está dispuesta a grabar el “cumpleaños feliz” para regalárselo a los madrileños con un ejemplar del mundo. Vuelva moreno de verde luna, como Arenas, tableteado como José María-Cristiano-Ronaldo-de-FAES, blanco y radiante de azahar como Paco Camps. Cuídese de las anchoas de cantabria, de los vuitones colgantes de Rita-alcaldesa, de los bigotes sin barba del Bigotes, de las barbas sin bigotes de Correa. Cuando regrese, estoy seguro que encontrará una España próspera, sin parados en el INEM, con botines y gonzález buceando en comisiones bancarias, con roucos de palios extendidos, con cataluñas españolizadas por ansones, santos y pedros jotas, con cospedales y trillos justicieros. España estará alimentada con la dieta de la tila y lucirá caderas morenas de quinceañera.

Que lo pase bien, don Mariano. Voy a llorar un rato entre pinos segovianos por trece rosas fusiladas un cinco de agosto de una madrugada cualquiera.




jueves, 30 de julio de 2009

DEMOCRACIA Y DIGNIDAD

Los dictadores siempre apelan al bien del pueblo para justificar su implantación, su permanencia en el poder y el expolio de los derechos más fundamentales y humanos. Por eso las dictaduras se sitúan fuera de la política, porque arrancan el poder de las manos del pueblo que debe ejercerlo convirtiendo en súbditos a los ciudadanos. Están pues viciadas en su propio nacimiento y su duración significa la antipolítica por antonomasia. Es imposible dignificar la tiranía.

La democracia por el contrario se sitúa dentro del campo específicamente político. Cada ciudadano ejerce el derecho irrenunciable a construirla día a día y acepta sobre sus espaldas el peso de su dignidad. Cada uno es responsable de su fortalecimiento, de su blancura, de su transparencia. La democracia es el resultado de la postura vital de cada ciudadano.

Carlos Fabra, un hombre digno y honorable en palabras de Mariano Rajoy, se ha permitido afirmar que a los votantes no les preocupa ni les importa si Camps y él mismo son inocentes o culpables de ciertos hechos. Que ambos siguen teniendo indefectiblemente el voto favorable de sus electores. ¿Qué concepto tiene Fabra de la democracia? ¿Responde a alguna escala de valores? ¿Hasta tal punto desprecia la dignidad de los ciudadanos?

Con ocasión del Caso Gürtel, todos hemos sido testigos de las adhesiones inquebrantables hacia ciertos mandatarios posiblemente inmersos en la corrupción. Sin prejuzgar la inocencia de los imputados, hemos visto a Rajoy proclamando, no sólo su respeto por el posible éxito judicial del Presidente valenciano, de Fabra o del tesorero de su partido, sino que hemos contemplado su implicación política y hasta vital junto a ellos. Hasta tal punto llega este apoyo que si los tribunales encuentran culpables de algún delito a uno o a otro, es el propio Presidente del PP. el democráticamente corresponsable y condenable políticamente en consecuencia.

La última encuesta del CIS deja patente el crecimiento mínimo, pero crecimiento al fin y al cabo, del PP. pese a estar pasando por el momento más oscuro de su historia. No cabe duda que la explosión de la burbuja inmobiliaria, el creciente número de parados, la crisis económica que aplasta a familias enteras hace crujir los sótanos del gobierno socialista. Pero debería ser más soportable el sufrimiento de una democracia dignamente vigente que la dudosa mejoría de unos representantes corruptos.

Los que sufrimos la corrupción esencial de una dictadura, y fuimos muchos de los que aún vivimos, no deberíamos exponernos a la posibilidad de una corrupción democrática. El Partido Popular puede y es deseable que algún día gane las elecciones. Pero debe antes limpiarse del magma que le impregna. No vale hablar de los GAL, de Filesa, de Mariano Rubio o de Urralburu (se acuerda alguien de Urralburu?). Aznar, Rajoy, Cascos, Soraya, Cospedal, Ponds y muchos otros están superados por ellos mismos. Mirar sólo al pasado negando el presente implica carecer de futuro.

A Algunos votantes, como a ciertos dirigentes, no les importa la suciedad de ciertos cargos públicos. Si Fabra tiene razón, no sé qué hacer con la dignidad que me queda.

domingo, 26 de julio de 2009

EL SALVADOR ESTA CERCA

Es urgente una regeneración de la democracia. Los ciudadanos deben forzar la conversión del PSOE (nada hay que exigirle al PP.) para que la ética política no siga deteriorándose. De lo contrario, es inevitable la vuelta de quien siente el deber, con el sufrimiento que eso conlleva, de ponerse al mando. “Todos los días siento la tentación de regresar a la política” y si la calidad democrática sigue deteriorándose, podría volver. Lo ha dicho Alvarez Cascos. “Zapatero es el responsable máximo del clima de deterioro democrático que pasa por la utilización de los medios del Estado para organizar una limpieza, no étnica, pero sí política” Y agrega: “estamos en una fase muy avanzada de un estado policial, en la que participan determinados policías, algunos de ellos, muy conocidos que trabajan al servicio del Gobierno y del poder político”. Es por tanto el gobierno y el partido que lo apoya quienes han enfangado el camino democrático haciéndolo impracticable. El PSOE, los jueces capitaneados por Garzón, la Policía que diseñó los GAL, están empeñados en aniquilar al Partido Popular. Correa, el Bigotes, Bárcenas, Camps, Barberá son meras excusas para realizar esa limpieza política emprendida por el Presidente del Gobierno. Nada han hecho para pervertir la imagen del PP.. Muy al contrario, son sus mártires. Baltasar Garzón es el Dr. Menguele, artífice mayor de los hornos creamatorios, perseguidor de falsos delitos mientras desayuna pan con aceite en la cafetería Riofrío.

Rodríguez Zapatero debería reflexionar porque el Sr. Cascos, hechura de arte conyugal, está dispuesto a volver para regenerar la ética democrática. No basta con Rajoy, Mayor Oreja, Cospedal, Soraya, ni ese aprendiz de abogado que es Federico Trillo. Hay que regenerar el presente llenándolo de pasado: de nuevo la calle para Fraga, albacea único del caudillo, cetro devuelto por usurpado a Aznar-Bush, regreso de los Ramallos, las Marías, los Iturgaitz. Destierro post mortem para Polanco y su prole. Reconstrucción de Carlos Dávila, Losantos, Pedro J. peones negros. Curri, Marhuenda, de Prada, costaleros de Esperanza entronizada. Acebes, Astarloa y Alcaraz, plenipotenciarios de Castellana, Recoletos, Puerta del Sol. Isabel san Sebastián, oráculo encumbrado en el kilómetro cero de la decencia con denominación de origen.

Cascos no propicia un golpe de estado (a lo mejor sí). Prefiere un golpe de fairy. Que los sastres regalen alpacas, los devotos aporten buitones, los correas sean correajes para desfilar elegancia por las piedras-testigos de bodas imperiales. Con Obispos que niegan la comunión a niños con síndrome de cariño, pero aprietan las manos de ministros adúlteros.

Si el Caudillo levantara la cabeza. Si Aznar cumpliera con su papel de salvador de la historia. Si Díaz Ferrán pusiera la entrepierna encima de la mesa. Si Zapatero rodara por una cuneta al alba. Si… Todo es posible. Nos queda Asturias, patria querida y D. Francisco-Pelayo reconquistando palmo a palmo la España limpia y honrada.