sábado, 31 de octubre de 2009

EL DESCANSO DEL HOMBRE

Madre, para descansar morir"

(A. Machado)



Llevo seis meses muerto. Desde febrero exactamente. Fue un entierro breve: mi mujer, mi hijo, tres amigos y siete conocidos. "YA DESCANSO". Una frase diez veces repetida. Como si mi vida hubiera sido un tremendo cansancio. Cuando se fueron todos, sentí la soledad boca arriba, con la tierra encima, con las flores encima, y la escarcha, y el viento y la ausencia. Incómoda postura de muerto. Helado ademán de muerto. Falta de costumbre, tal vez, de ser muerto.


En los cementerios todo es paralelo: los cipreses, los nichos, las tumbas. Como campos de olivos andaluces. Muertos seminales, abonos válidos, pero sobre todo paralelos. Soledades cercanas, casi inmediatas, que nunca se encontrarán en la intersección de una esquina. Una historia junto a otra, cada una con sus besos, su felicidad, su tristeza, su plenitud y sus sinsentido. Pero cada muerto con su muerte, sin un intercambio dialogal.

Escuché lágrimas cercanas. Golpes secos de tierra. Flores derramadas. Y los amigos susurrando: "YA DESCANSO". Como si también esa otra vida hubiera sido un tremendo cansancio. En esta inmensa cama, desconozco a quien está a mi lado, DESCANSANDO, desde hace unas horas. Así fue la vida: nos cruzamos con otros, estuvimos con otros, caminamos junto a otros, ignorándolos casi siempre a todos.

A ella nadie le habló de mi muerte. No estuvo en la breve despedida. No verá esquelas publicitarias de mi marcha. Pero estoy seguro: algún día encenderá una flor con su mirada y se besará los labios con el último viento de mis besos. Aquí soy la conciencia de un recuerdo. Pero fui la conciencia buscada por su cuerpo, por su boca de luz y por su risa.

Un muerto es un cruce de caminos, una confluencia de luces y de sombras. Un muerto es una plaza abierta y ancha con niños juguetones, viejos dormidos, muchachas asomadas a los pechos y machos encelados. Pero

un muerto es, sobre todo, un silencio vertebral, un pacto del amor con la nada, un bloque de alegría grabado de tristeza.

Aquí estoy a los seis meses de muerto. Cargado de lunas, de tierra y de lágrimas viudas. CANSADO, TERRIBLEMENTE CANSADO de soportar vuestras vidas sin mí, CANSADO de ser recuerdo y fecha de un calendario. Olvidadme el mes próximo. Quiero enamorarme de la tierra que me ha tocado en herencia, del vientre ancestral y diminuto que me alberga, del útero caliente de madre primitiva. A lo mejor un día, en las afueras del alma, os crece una nostalgia, una duda, una pregunta. Entonces, a lo mejor entonces, sabréis que el mar es un muerto que os dijo adiós en febrero.




miércoles, 28 de octubre de 2009

ROUCO, EL POLITICO

La Jerarquía eclesiástica nunca ha renunciado al dominio de las conciencias. Los valores de la razón, laicicidad, secularización, autonomía del ser humano frente a la suprema decisión vital de su existencia, no entran dentro de la escala respetada por los Obispos. Muy por el contrario, son ellos, y solamente ellos, los que tienen la misión encomendada por Cristo de guiar a sus fieles en sus decisiones morales y de trazar el camino, siempre unívoco, de la bondad moral. Depositarios del monopolio de la verdad, son ellos quienes deciden desde no se sabe qué ciencia infusa lo que cada cual debe hacer en cada momento y en cualquier campo de la actividad humana.


Por otra parte, su adhesión inquebrantable a ciertos regímenes siempre dictatoriales, ha hecho acreedores a estos domadores de la verdad de la convicción de que debe darse una duplicidad de actuaciones paralelas entre lo mundano y lo religioso: se reclama así la existencia de universidades católicas frente a las estatales, colegios religiosos frente a los públicos y un derecho único a formar conciencias que debe proyectarse sobre cualquier formación humana venga de donde venga. El estado natural del hombre no es la búsqueda, sino más bien la aceptación de lo que otros piensen por él. La exploración de la verdad no tiene sentido si ella viene ya impuesta por visionarios ungidos y destinados a impartirla como un regalo.

Esta actitud se deriva de una concepción piramidal de la vida en cuyo vértice se sitúa al Papa, infalibilidad absoluta incluida, se ensancha a través del episcopado y descansa sobre una cuerpo de hombres y mujeres sometidos y destinados a soportar el peso de todo el que está por encima de ellos. El giro exigido por el Vaticano II abandonando la concepción de la Iglesia como sociedad perfecta para convertirla en pueblo de Dios nunca fue asimilado por el episcopado. Lo humano como valor en sí mismo no fue asumido por el cuerpo jerarquizado que temía se le fuera de las manos el poder de sumisión impuesta, del que ha venido gozando durante la historia.

La Jerarquía eclesiástica estaba en las espaldas de esos movimientos políticos que fueron la democracia cristiana, la acción católica y todas las organizaciones en las que se “utilizaba” la careta de autonomía para esconder decisiones con pectorales al fondo.

Aparecen ahora Alfredo Dagnino, Benigno Blanco, José Manuel Vidal, y muchos otros queriendo formar un partido político de inspiración cristiana respaldados y bendecidos por el Cardenal Rouco Varela. La Conferencia Episcopal Española nunca ha aceptado la no confesionalidad de la Constitución española. No ha dado por enterrado el tiempo del franquismo en el que de forma adúltera ejerció un dominio absoluto sobre la legislación, las costumbres y la orientación vital de este país. Añora tiempos de dictadura cristiana (qué contradicción), de cruzada vencedora de comunismos, de hordas judeomasónicas y reclama regímenes que impongan la cruz en las escuelas, la espada en las conciencias y la presencia del sagrado Corazón en los montes de cada pueblo. La dictadura episcopal ejercida entonces quiere prolongarse a sí misma aún en ausencia de los golpistas que la auparon a la cúspide. El proyecto de la nueva normativa del aborto, la educación para la ciudadanía, hasta ciertas fiestas no típicas de nuestro sentido mediterráneo son tachadas ridículamente de anticristianas. Su desprecio por la iniciativa humana, por el papel de la mujer, la falta de respeto a la investigación, su oposición a los avances tecnológicos son siempre rechazados en nombre de una dios domesticado, jibarizado, empobrecido, siempre juzgador, nunca compañero de la aventura existencial.

Rouco y los Obispos quieren tener un brazo político fuerte. No les basta con los brazos extenuados del crucificado.

viernes, 23 de octubre de 2009

CAMPS ENCONTRO EL PUNTO G

El muy honorable Presidente del País valenciano no sigue de cerca el desarrollo de la trama gürtel. No le interesa. Sin embargo, preconiza que el partido socialista saldrá expulsado de la Moncloa por dos letras “g” : gal y gürtel.


En España fuimos muchos los que luchamos por el advenimiento de una democracia. Algunos cayeron en el intento. Otros pasaron años entre barrotes. No cejaba la bota militar en su afán de ahogar la palabra. Y la palabra entre rejas es sólo la aspiración fallida de la libertad. Vivimos así cuarenta años. Pero nadie nos pudo ahogar el sueño de ver algún día el horizonte abierto, para siempre abierto.

Da pena constatar que muchos ciudadanos atribuyen la corrupción a esa democracia conquistada. Es cierto que en la democracia aparecen zonas oscuras. Pero es más cierto aún que las dictaduras son oscuridad en sí mismas. Estas nacen de golpes ilegales y terminan podridas en tumbas aunque estén abrigadas por cruces de Avalos.

De aquella boda vienen estos hijos. Aznar, reciente y brillante profesor de ética en la universidad de Murcia, llevado a hombros por Felipe II, celebró nupcias imperiales entre el clan de Valladolid y la Moncloa. Allí estuvieron desde Berlusconi hasta Correa y el Bigotes. Fotos para la historia y para la vergüenza. Por más que le pese a Miguel Angel Rodríguez, los testigos de semejante acontecimiento están ahí. Y es muy significativa su presencia. La trama gürtel se vistió de elegancia y su firma está archivada en los anales escurialenses. Aznar no puede quejarse, como ha hecho en Italia, del trato que le dispensó Telecinco en el programa La Noria. Fue él mismo el que le enseñó a toda España el album corrompido de la boda de su hija.

Gürtel hizo amistades entre los naranjales valencianos. No le bastó Castilla-León, Madrid, tal vez Galicia. Madrid se relaja con la espuma mediterránea casi todos los fines de semana. También el esperpento puso allí su tienda de campaña. Sembró su estancia de coches, relojes, trajes y se trajo un puñado de euros. Los del fin de semana gastan dinero. Los mafiosos lo invierten y recogen sus ganancias para reinvertirlas en Bárcenas y Merinos.

Camps ha encontrado el punto G. No estaba donde los demás pensábamos. Vive en la Moncloa y Zapatero y su partido van a ser víctimas de una noche de juerga que les llevará al exilio del poder. Alberto López Viejo, Benjamín Martín y Alfonso Bosch no han entrado posiblemente nunca en la casa presidencial. Benedicto XVI pagó su tributo de sonorización a un grupo digno de Sicilia. Bárcenas tiene despacho en Génova. Y el honradísimo Costa, que siguió órdenes de la dirección central y que destaca pos su honorabilidad y rectitud ha sido destituido y enviado a las alturas de las Corts valencianas. A Camps le ha traicionado el G-ps de su orgullo y su cinismo.

En democracia hay oscuridades, zonas turbias por eclipses siempre parciales. Los que entonces luchamos, los que dejaron sus vidas por cunetas olvidadas, los que arrastran barrotes en el alma, bendicen cada mañana la libertad florecida en las ventanas.




martes, 20 de octubre de 2009

ESTABAN ALLI

Estaban allí. Amantes de la vida. Doscientos cincuenta mil. Un millón. Dos millones. No importa. No eran cifras. Eran los amantes de la vida. Venidos de la España grande y libre. Juan Cotino de la Valencia gürteliana. Mayor Oreja, campeador fetal. Atacando la homosexualidad en Europa. Añorando la ley de vagos y maleantes. Construyendo guantánamos gays. Amputando derechos de cariño, rompedor de arras matrimoniales, de amores entusiastas. Aznar presente. Por un deber moral, dijo. Deber que no cumplió cuando era presidente. María Dolores hermoseando el camino de Sol a Puerta de Alcalá. María Dolores infiltrada de Ricardo Costa para aguantar el gesto, de Camps-sonrisa-ensayada.


Estaban allí. Amantes de la vida. Se les notaba cuando exigían la dimisión de Zapatero traidor. Cuando se pedía la vuelta de Aznar “porque tiene más cojones que Mariano” La testosterona cuenta en las urnas y alumbra fetos bélicos, destructores, desangrando medias lunas.

Los Obispos escondidos. Representados por vicarios del Partido Popular, Acción Juvenil Española, Alternativa Española, Falange Auténtica y de las JONS, exigiendo un estado confesional, como cuando Franco, misa obligatoria de siete para campesinos y criadas, de doce para chaquetas blancas de secretarios del movimiento y esposas de velo negro de encaje. Rouco escondido con Rajoy, pero dando la cara en las banderas de águilas imperiales. Benigno. Isabel, Cristina, soportando la responsabilidad de defendernos contra los que quieren implantar el nuevo holocausto, contra Bibiana Aido gaseando familias y un niño de tres años que afirmaba que Zapatero quería matarlo.

Se celebraba, qué coincidencia, el día mundial contra la pobreza. También estuvieron en la calle unos cuantos amantes de la utopía. Exigían pan para mil millones de hambrientos. Con un poco de aceite sobrante de las almazaras de la Unión europea, de las ayudas a los grandes bancos, de los díaz ferrán multinacionales, del primer mundo-estado de bienestar, mundo de obesos vestidos de diseño. Pidiendo un poco de caldo caliente para estómagos desacostumbrados. Por si sobra de la compra de material bélico, de bombas de racimo. Por si quedan migajas de vida de tanto uranio enriquecido o empobrecido, destinado a diagramar muertes de hombres, de mujeres, de niños. Por si algún mandatario renuncia a la posesión de armas atómicas, nucleares y se pone en la cola del pan e invierte en paz y abundancia, en agua, en vacunas, en universidades. Estuvieron los que creen en la utopía y saben que a lo mejor un día los poderosos deciden echarle al mundo el brazo por el hombre y darle el cariño que el pobre necesita para convertirse en hombre, en mujer, en niño sonriente, en humano.

También estuvieron en la calle. Pocos, muy pocos. Acunando la utopía. No estaba Aznar, ni Mayor Oreja, ni Cospedal. Ausentes los Obispos, las isabeles, las cristinas, los benignos, cuidadores de reservas familiares. Los amantes de vidas iniciales despreocupados de mil millones de vidas desangradas por el hambre, la falta de agua, analfabetismo hasta los ojos, carentes de vacunas, muertas de asco. Millones de humanos convertidos en pasto de moscas, de plagas. Millones de seres que nunca aprenderán el gozo de la sonrisa porque sólo tendrán capacidad de mueca.

Unos tuvieron el lujo de Sol, Alcalá y esa Puerta mayestática cerrando el paso a la bella utopía de los que sólo pueden limosnear un pedazo de pan chorreado del aceite que le sobra al despilfarro.

domingo, 11 de octubre de 2009

PERSEGUIDOS

Rubalcaba no era el ojo que todo lo veía. Ni el Fiscal acosaba. Ni la Policía exigía postura manos arriba. Ni Garzón era el Torquemada inquisitorial. Bárcenas, Costa, Camps, López Viejo existían. Eran carne de Correa. Sangre de Bigotes. Despacho contiguo. Amistad de Esperanza. Rajoy inexistente, holograma de sí mismo. Defensor de inocencias, agustina frente al mundo. Cabeza de martirologio incomprendido. Bárcenas-Costa-Camps-víctimas de las instituciones que soportan el estado de derecho.


Después de meses de sufrir persecución, de sentirse arrinconados por las calumnias de todos los estamentos, de culpar a otros de los males sufridos, Pons reconoce que “lo que estamos viendo es algo muy bochornoso que salpica a dirigentes populares, que hay que depurarse y eliminar aquellas partes que pueden estar intoxicadas”

Rubalcaba no era el ojo que todo lo veía. Cospedal sin pruebas de tanta denuncia calumniosa. Sigue inculpando al Fiscal General del estado, al Ministro del Interior y a Teresa Fernández de la Vega de un espionaje sólo real, probado y ahogado en la Comunidad de Madrid.

Se habla de los implicados como seres extraños al Partido Popular. Se aprovecharon de éste, pero como ajenos, como adheridos parásitos que siempre fueron advenedizos. Nunca carne de gaviota. Nunca sangre de génova. Tesorero, Secretario General del partido en Valencia, Presidente de una Comunidad, Senadores de Madrid o de España. “Diez o quince señores desconocidos que han montado una trama de insensatos", dice Miguel Angel Rodríguez. “Gentecilla a los que no se les conoce una frase, una idea... Nunca han puesto la cara por el Partido Popular". "¿Quién era Ricardo Costa hace seis meses?", se pregunta el antiguo portavoz de Aznar-suegro-de-Agag-amigo-de-Briatore-Berlusconi. "Esta gentecilla es gentuza que se han financiado ellos mismos con una red creada desde Las Antilllas", sentencia MAR. A eso quedan reducidos los amigos de Rajoy, sus validos. D. Mariano debería defenderlos también de la humillación infringida por este comentarista de palabra anoréxica, que sigue viendo hordas judeomasónicas como si de un generalísimo de mercadillo se tratara. Los perseguidores no son sólo las instituciones del Estado. Rita, Esperanza, Pons se han erigido ahora en defensores del honor popular. Exigen responsabilidades, envueltos en albornoces verdes y bolsos de marcas registradas. También ellos se revuelven contra amigos del alma hasta hace un ratito, sólo un ratito. Si alguien tiene que caer que sea el otro. Para eso tiene reloj y coche y viste elegancia calle Serrano.

Ricardo queda destituido temporalmente. Sin merma de su integridad, de su buen hacer, sin infravalorar su gran aportación como secretario general. Sin merma de la confianza depositada en su persona ¿Por qué entonces le expulsan? A lo mejor porque se quedan los traidores, porque Rajoy no tiene coraje suficiente (o como se llame eso), porque los berlusconis tienen inmunidad y soportan la vergüenza de ser quienes son.

Ahora hay una oposición importante y seria: han echado a la gentecilla-gentuza. Quedan los que quedan. Mariano al frente enfrente a Rubalcaba, el ojo que todo lo veía.




martes, 6 de octubre de 2009

Si tuviera tus manos, si tuviera

tu boca estremecida y entregada.
Si tuviera tu sombra iluminada,
si tuviera tu cuerpo, si tuviera…

Recorro la esperanza hasta la espera,
la ausencia indeseable y deseada.
No estoy y estoy en cada encrucijada,
olvidado en la esquina de tu acera.

Desde tu vientre voy hasta tu vientre.
Peregrino del muslo a la cadera
hacia la rosa azul de la alegría.

Allí quiero hospedarme hasta que encuentre
la constancia de alguna primavera
o la espalda de la melancolía.

sábado, 3 de octubre de 2009

Soy simplemente un hombre.

un puñado de tierra con tres partes de agua.
Un cerebro asombrado,
unas ingles que buscan otras ingles
para apretar la vida
y fundar otro puñado de tierra con tres partes de agua.
Un hombre simplemente.
Sin mayor aspiración que olvidarse a sí mismo
y morirse de pena con el asco en los ojos.
Deja el hombre un recuerdo estremecido
en el barro de otro,
en las ingles del otro,
en el asombro cerebral de quien lo quiso?.
Finaliza el hombre con el hombre,
como una calle cortada, sin salida,
coincidiendo con la nada,
empotrado con la nada sin un mar adyacente?.
Soy simplemente un hombre, una pregunta.
Barro, cerebro, ingles.
Pero olvido de mí mismo,
olvido ante todo,
olvidado ante todo.

viernes, 2 de octubre de 2009

OBELISCOS INFAMES

Allá cada cual con su dignidad, con su escala de valores, con el entorno alrededor de sí mismo. Hasta llegar a la intimidad, donde el ser humano es una pregunta y una respuesta siempre provisional sobre el propio misterio.


Algunos tienen prisa por exponerse, por colocarse fuera de su profundidad y queda entonces a la pública subasta la indignidad como fundamento de sus vidas.

Jesús Neira fue nombrado por Esperanza Aguirre Presidente del Consejo Asesor del Observatorio Regional de violencia de género. Todos estuvimos de acuerdo en condecorar a este hombre y pusimos su nombre a la calle valentía. Colocamos medallas en el callejero madrileño y albergamos su larga agonía hospitalaria como propia. Ana Botella afirma que él “representa los valores que hay que exaltar en una sociedad como la nuestra”, aunque esté presidida por “un jovencito que sólo dice imbecilidades” como afirma el profesor, aunque haya que despreciar un parlamentarismo democrático, como también asegura, o desprecie al Presidente de los EE.UU por “no ser un líder de primera sino un pelele” Valores cívicos donde los haya que deben ser inculcados al mundo universitario donde se mueve el Profesor Neira. Allá cada cual con su dignidad, pero que conste que el Presidente del Consejo contra la violencia de género se mofa de la gordura de unas niñas fotografiadas junto a un mandatario negro elegido por los norteamericanos y el jovencito de las imbecilidades elegido por el pueblo español. Apóyese, Profesor, en los brazos de Ana y Esperanza. Ellas son portadoras de valores eternos.

Goztone Mora, secretaria de inmigración de la Genelalitat valenciana, no entiende la alianza de civilizaciones, ella, cuya preocupación consiste en dar acogida cálida a tantos y tantos estómagos vacíos que cambian la vida por un avecrém caliente. Refiriéndose a la fotografía tan interesadamente comentada, Goztone asegura con una sintaxis ininteligible: “A mí me dejó consternada la cara de una de las hijas. Creo que es la pequeña, se parece a su padre. Es una cara que a mí me ha tocao, me ha tocao (sic) en el sentido de negativo, pero de tener dentro de una rabia contenida impresionante. De verdad, una cría tan pequeña. ¡Que pena, que pena, eh, que ya viva allí! He entendido, ahora sí que he entendido, viendo la imagen familiar, la alianza de las civilizaciones. Ahora he entendido todo. Es que la foto habla por sí sola”.

Gracias a una niña y al apoyo de César Vidal, esta secretaria de audi oficial, ha entendido el misterio de la inmigración que el Partido Popular iluminó con el propuesto contrato de Rajoy sobre la españolidad de los que vienen.

Allá cada uno con su dignidad. Hasta la Giralda está manchada del vómito caliente de Antonio Burgos. Hace años, muchos años, me invitaron al primer acto oficial de Carrero Blanco como Presidente de Gobierno fuera de Madrid. Me negué y el ABC me llamó “perro ladrador”. Ya por entonces, hace años, muchos años, Antonio Burgos llenaba de podredumbre las páginas de ese periódico. No cabe apelar a la libertad de expresión confundiéndola con la incapacidad de decencia. Este depredador de inocencias no ha tenido más alimento que las alimañas que le ponen en bandeja ciertos medios de comunicación. Sobre su infinita capacidad de impudicia descansan las consideraciones que hace de la fotografía de unas niñas, hijas de Presidente del Gobierno. Me niego a reproducir ninguna de sus frases, viralmente infectas, para no manchar la luminosidad de la pantalla.

Los obeliscos tienen todo un significado en la visión freudiana. Hay cabezas que sólo sirven para coronar esos obeliscos.